Un mono machín blanco merodeaba por las calles y techos de la urbanización San Luis, en la ciudad de Chiclayo, región Lambayeque, fue rescatado en óptimas condiciones por los especialistas del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor), informó el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri).
El
Serfor precisó que la captura del ejemplar se produjo luego de cinco días de seguimiento que contó con el apoyo de la Policía Nacional del Perú y del Serenazgo de la Municipalidad Provincial de Chiclayo, ante la solicitud de los vecinos quienes
alertaron de la presencia del mono machín en los árboles aledaños a un colegio y el mercado Modelo de Chiclayo.
Tras monitorear las zonas que frecuentaba y entrevistar a los moradores que habían tenido contacto con el mono machín, con el apoyo de un médico veterinario, se utilizó un dardo tranquilizante y una malla "cazamonos" para capturarlo. Según las primeras evaluaciones, se trata de un mono macho adulto en aparente buen estado de salud.
Se sospecha que el espécimen estuvo regular tiempo en cautiverio y luego fue abandonado por sus captores, debido a que está ligeramente amansado y se acostumbra a la presencia humana. El primate fue puesto a buen recaudo en la sede de la Administración Técnica Forestal y de Fauna Silvestre (ATFFS) de Lambayeque, donde fue hidratado y alimentado.
Tras brindarle los primeros cuidados, el
Serfor gestiona su reubicación en un centro de cría autorizado donde pueda completar su proceso de recuperación. Recordemos que el hábitat del primate es la Amazonía y constituye una
víctima del tráfico ilegal de fauna silvestre, actividad mediante la cual los extraen de la naturaleza para lucrar con ellos y venderlos como mascotas.
Esta situación, además de atentar contra el bienestar del animal, puede ser perjudicial para la salud de los seres humanos porque podrían transmitir enfermedades, además de ocasionar mordeduras.
Serfor recordó que la posesión no autorizada de fauna silvestre es una infracción a la normativa que es sancionada con multas que fluctúan entre 0.1 y 5,000 UIT; y puede ser reprimida con pena privativa de libertad de 3 a 5 años.