00:47 | Moscú, jun. 24 (AFP).
El jefe de la milicia Wagner, clave en la ofensiva militar rusa en Ucrania, aseguró el sábado que ingresó a Rusia con sus tropas para deponer al mando militar ruso, y que él y sus 25.000 hombres están "listos para morir" en su cometido.
Yevgueni Prigozhin, jefe del grupo paramilitar Wagner, juró "llegar hasta el final" en su campaña contra el mando militar ruso y que sus fuerzas traspasaron la frontera rusa por la región sureña de Rostov.
Prigozhin aseguró que sus fuerzas van a "destruir todo lo que se ponga" en su camino, y que derribaron un helicóptero ruso que los atacó.
Anunció la movilización contra las fuerzas armadas rusas tras acusarlas de atacar a sus tropas.
"No salgan de casa"
Ante la situación, el gobernador de Rostov, Vasili Golubev, llamó a la población a "no salir de casa salvo por necesidad".
El alcalde de Moscú, Serguéi Sobianin, anunció el sábado que "medidas antiterroristas" fueron adoptadas en la capital.
Videos que circulan en internet en Rusia muestran a hombres armados que rodean edificios administrativos en Rostov, con tanques movilizados en el centro.
El ejército ruso negó haber atacado al grupo Wagner y calificó las acusaciones de "provocación".
"Los mensajes y videos difundidos en las redes sociales por Prigozhin sobre supuestos 'bombardeos del ministerio ruso de Defensa contra bases de retaguardia del grupo paramilitar Wagner' no se corresponden con la realidad y son una provocación", indicó Moscú.
Ayudar incluso "al diablo"
El empresario opositor ruso en el exilio Mijaíl Jodorkovski llamó el sábado a la población a apoyar la rebelión de Prigozhin, tras señalar de que es importante apoyar "incluso al diablo" si decide enfrentar al Kremlin.
Prigozhin, considerado durante un tiempo como aliado cercano del presidente ruso, Vladimir Putin, fue ganando influencia política y se lanzó en una confrontación con autoridades políticas y militares que ahora parece haber desbordado el campo de la retórica.
Tras sus críticas, el servicio de seguridad ruso FSB lo acusó de hacer "un llamado a comenzar un conflicto civil armado" y pidió a los combatientes de Wagner "tomar medidas para detenerlo".
El fiscal general ruso, Igor Krasnov, informó a Putin de que abrió "una investigación penal" contra Prigozhin por "amotinamiento armado", según el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
Aseguró que Putin se mantiene "constantemente" informado de los acontecimientos por los servicios de seguridad.
Prigozhin declaró en un mensaje de audio que las tropas rusas "han llevado a cabo bombardeos con misiles contra nuestras bases de retaguardia" en el frente ucraniano, y que muchos de sus combatientes murieron.
"El comité de comando del grupo Wagner decidió que hay que poner freno a quienes tienen responsabilidad militar en el país", prosiguió el jefe de los paramilitares, de 62 años.
El Ministerio de Defensa ruso dijo en un comunicado que "aprovechando la provocación de Prigozhin para desestabilizar la situación, el régimen de Kiev cerca del frente de Bajmut está concentrando unidades (...) para realizar acciones ofensivas".
"Somos 25.000 y vamos a determinar las causas del caos que reina en el país (...). Nuestras reservas estratégicas son todo el ejército y todo el país", proclamó el ministerio.
Ataques en Ucrania
Estas tensiones se dan en plena contraofensiva de las tropas ucranianas para reconquistar territorios tomados por Rusia desde el inicio de la intervención militar en febrero de 2022.
Pocas horas antes del estallido de esta crisis, Prigozhin aseguró que el ejército ruso se estaba "retirando" en el este y el sur de Ucrania, contradiciendo las afirmaciones del Kremlin, que considera que la contraofensiva de Kiev está fracasando.
"El ejército (ruso) se retira en las zonas de Zaporiyia y Jersón (sur), las fuerzas armadas ucranianas están haciendo retroceder" a las tropas rusas, declaró en una entrevista publicada en Telegram por su servicio de prensa.
"No hay ningún control, no hay triunfos militares" de Moscú, insistió Prigozhin, agregando que los militares rusos "se lavan con su sangre", aludiendo a grandes pérdidas sufridas por las tropas regulares.
Sin embargo, autoridades ucranianas afirmaron que Rusia lanzó la mañana del sábado una andanada de misiles en varias partes de Ucrania, causando víctimas y daños.
En la ciudad central de Dnipró, "varias casas fueron destruidas por completo. Quedó un enorme cráter después de la explosión", afirmó el alcalde local Boris Filatov en Telegram.
En la capital ucraniana Kiev fueron "detectados y destruidos más de 20 misiles", según Sergi Popko, jefe de la administración militar de la ciudad.
En Járkov, segunda ciudad ucraniana, un gasoducto fue destruido aunque no se registraron bajas, según el gobierno regional.
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(FIN) AFP/CCH
Publicado: 24/6/2023