Con apenas 2 kilos de peso y a sus cortos 10 días de vida, la bebé más pequeñita que nació en pandemia fue sometida a una cirugía compleja a corazón abierto para corregir una cardiopatía congénita grave que ponía en riesgo su vida. La cirugía exitosa estuvo a cargo del equipo multidisciplinario cardiovascular del Instituto Nacional de Salud del Niño-San Borja.
Después de dos meses y seis días, su madre, Mayra Cortez, tuvo un encuentro emotivo con su pequeña, quien requirió de una cama en la unidad de cuidados intensivos durante este tiempo y hoy ya se encuentra en el área de hospitalización, donde permanecerá hasta su alta médica.
“La bebé ha tenido que soportar una operación compleja en sus primeros días de vida, pero es una guerrera que logró salir adelante y nos alegra ayudarla para que regrese a los brazos de su madre”, destacó el cirujano cardiovascular Hugo Reyes Albán.
La pequeña Xianna F. C. nació en un hospital de Chimbote y fue rápidamente derivada al INSN-San Borja, ante el diagnóstico de una enfermedad congénita cardiaca grave de trasposición de grandes arterias, es decir que los vasos grandes que llevan sangre del corazón a los pulmones y al cuerpo estaban conectados de forma incorrecta.
Reyes explicó que esta situación representaba peligro para la bebé, ya que no tenía suficiente oxígeno en el torrente sanguíneo para satisfacer las necesidades de su cuerpo, provocando una respiración rápida y dificultosa, y una frecuencia cardíaca acelerada.
En un esfuerzo conjunto del equipo multidisciplinario cardiovascular –conformado por cirujanos, anestesiólogos, enfermeros y técnicos de enfermería– se realizó una cirugía compleja mediante la técnica switch arterial o cirugía de Jatene de reparación anatómica, que permite reconectar los grandes vasos del corazón de la bebé con su respectivo ventrículo. De esta forma se colocó cada arteria en su lugar a fin de que la sangre llegue correctamente hacia todo el cuerpo. La cirugía duró cuatro horas.
Después de la operación, la bebé ha comenzado un proceso de recuperación importante, gracias a la atención del equipo de Cardiología y Cirugía Cardiovascular, incluido los cuidados postoperatorios en UCI.
La gestión de la directora general, Zulema Tomas Gonzales, destacó esta cirugía en el marco del Día Mundial del Corazón, celebrado ayer, y que permite dar a conocer que estas cirugías no se han postergado en pandemia. En lo que va de este año se han practicado más de 220 intervenciones cardiovasculares a niños de diversas regiones del país.
La jefa de Cardiología y Cirugía Cardiovascular del INSN-San Borja, Eneida Melgar, agradeció la labor del equipo multidisciplinario de Cardiología y Cirugía Cardiovascular que se encargan del abordaje de las cardiopatías congénitas considerando que al año nacen por lo menos 6,000 niños con problemas del corazón en el Perú, de los cuales el 80 % necesita una operación temprana para salvar su vida.