El personal de la Fuerza Aérea del Perú (FAP) está debidamente capacitado para el manejo de un radar meteorológico y de otro tipo, proveniente de cualquier empresa, a fin de brindar una información más precisa a las autoridades para actuar frente a las emergencias, afirmó el coronel Julio Villafuerte Osambela, director de Meteorología Aeronáutica (DIRMA) de dicha institución.
“Actualmente estamos en la capacidad de utilizar cualquier tipo de radar, de la empresa que quieran, porque el software es lo que ya dominamos. Nuestro personal está entrenado tanto para recibir un radar por parte del Estado o para cuando exista una emergencia y nos los presten otros países”, puntualizó la autoridad militar a la Agencia Andina.
Explicó que el personal FAP adquirió tal capacitación con el uso de un radar meteorológico portátil que fue cedido al Perú en calidad de préstamo por una empresa norteamericana hace seis meses, para conocer donde caerían las lluvias, la cantidad de precipitación, la activación de quebradas y la ocurrencia de huaicos, intensidad de vientos, entre otros, lo que conllevaría a tomar las medidas preventivas y mitigar posibles daños.
Sin embargo, lamentó que próximamente tendrán que devolverlo, cuando el país requiere contar con uno y propio.
Este radar, que puede ser trasladado fácilmente en un avión o helicóptero, permitirá monitorear las condiciones climatológicas u otros fenómenos atmosféricos en un rango efectivo de más de 100 kilómetros a la redonda.
Afirmó que este moderno equipo, cuyo costo asciende a 3 millones de soles, ahora se encuentra en el Grupo Aéreo N° 8 y antes fue ubicado en Chosica, Trujillo (La Libertad) y Piura, porque la única manera de convencer al tomador de decisiones es mostrando cómo se usa y sus bondades, acción que se cumplió.
“Los gobiernos regionales de La Libertad y de Piura están muy interesados en adquirir el radar meteorológico. Creo que un gobierno regional lo puede comprar y salvar muchas vidas. En esta época de lluvias, este equipo sería de mucha utilidad, ya que la proyección sería mucho mayor y con anticipación. En un futuro se podría convertir el agua de lluvia en un beneficio”, manifestó.
Villafuerte Osambela incidió en que si un gobierno regional adquiere el equipo, seguro otros lo replicarían, porque la información que arroja es muy sencilla y amigable para diferentes especialidades como la agricultura, minería, salud.
También mencionó que la eficacia del radar en casos de lluvias y diversos fenómenos meteorológicos, igualmente fue expuesta al director ejecutivo de la Autoridad para la Reconstrucción con Cambios. “Él quedó muy impresionado y está viendo la posibilidad de que este tema salga adelante, confiamos en ello”, acotó.
Añadió que se hizo lo propio con el ministro de Defensa quien- subrayó- está ayudando a buscar la viabilidad para poder contar con dicho equipo, porque es importante para la prevención de los desastres y en caso de que ocurran, contribuye mucho a dirigir la ayuda lo más pronto posible.
La FAP, continuó Villafuerte Osambela, requiere de este radar que es muy necesario para todo el país, porque la información que se obtenga será de gran utilidad para el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi), la Autoridad Nacional del Agua (ANA) y para todas las autoridades que lo requieran para que cumplan con su trabajo con mayor exactitud, como de los gobiernos regionales y nacional.
“Lo más caro de este equipo de alta tecnología que corrobora los pronósticos y trabaja en tiempo real, es la mano de obra y nosotros ya la tenemos entrenada. La Fuerza Aérea del Perú tiene 150 técnicos especialistas en este tema a disposición del Estado, pero nos hace falta el radar”, remarcó.
El director de la DIRMA mencionó que, por ejemplo, Ecuador tiene 18 radares, Brasil cuenta con un sistema de red en toda la Amazonía, Chile tiene 20 y nosotros tenemos uno prestado y a punto de devolverlo, teniendo el clima mucho más variable que el de ellos.
De igual modo, la Fuerza Aérea de Estados Unidos posee 500 de esos radares. Cada vez que vuelan a otros lugares los llevan. “Imagínense cuánto ahorraría una línea comercial al saber que no debe volar porque hay tormentas. Esto mejora la economía nacional y la prevención de desastres”, anotó.
Villafuerte Osambela recordó que cuando sucedió el Fenómeno de El Niño costero y él estaba en el Centro de Operaciones de Emergencia Nacional (COEN), algunos países, entre ellos Estados Unidos, ofrecían prestarnos estos radares para que nos sirvan de defensa y no se aceptó porque aún no sabían cómo usarlo.
Sistema de Vigilancia Amazónico Nacional
El titular de la DIRMA expresó que este radar sería parte de todo el módulo de meteorología que se quiere implementar en el Perú.
En ese contexto, citó el Sistema de Vigilancia Amazónico Nacional (SIVAN), que es una propuesta viable que ya está en el banco de proyectos, en el módulo meteorológico, que permitirá un monitoreo en todo el territorio nacional.
Comprende cuatro radares con una cobertura más amplia y serían instalados en Iquitos (Loreto), Puerto Maldonado (Madre de Dios) Pucallpa (Ucayali) y en la provincia ucayalina de Purús, en la zona de puerto Esperanza.
“Esa información se centraliza en esos puntos que se convierten en centros regionales y atenderían a toda la población. Pero también intercambiamos información con Brasil, porque le interesa mucho nuestra hidrología, el crecimiento de los ríos porque navegan en el Amazonas. Le interesa mucho conocer la masa de humedad que proviene del atlántico hacia el Perú”, anotó.
También lea:
Gobierno adquirirá dos modernos radares para fortalecer lucha contra narcotráfico
Hay otros equipos más que se incluirían, prosiguió, como detectores de tormentas, seis estaciones meteorológicas automáticas para mejorar la red meteorológica nacional y algunos equipos que ven la alta atmósfera.
El proyecto ya tiene buen tiempo y la suma a invertirse es de aproximadamente 20 millones de dólares, Hay países que lo quieren financiar porque es importante que su tecnología tenga presencia en la Amazonía, indicó.
“Es cuestión de conversar para que el gobierno peruano acepte. Es una vigilancia amazónica limpia, no hace daño y ayuda mucho al desarrollo del país”, concluyó el director de la DIRMA.
Más en Andina:
(FIN) TMC /MAO
Publicado: 1/2/2019