Dependiendo del grado de sudoración, el especialista debe aplicar el tratamiento más indicado, empezando con los productos tópicos que contengan aluminio y que ayudan a disminuir la sudoración.
“Ahora han salido muy buenos productos que se pueden aplicar y eliminan la sudoración hasta por 72 horas. Vienen en presentación como roll on para xilas y loción para plantas y palmas o espalda”, destacó.
Aplicación de la toxina botulínica
Agregó que, generalmente, estos productos se aplican dos o tres veces por semana y vienen en diferentes presentaciones para combatir la sudoración leve, moderada y severa, dependiendo de la concentración de aluminio.
Si a pesar de esto persiste la sudoración, añadió la especialista, el segundo paso es la aplicación de toxina botulínica, que paraliza el músculo generador de la contracción de la glándula sudorípara, permitiendo que el paciente deje de sudar.
“Esto lo hace el médico dermatólogo. (La toxina botulínica o bótox) se aplica directamente en la zona donde se produciendo la hiperhidrosis o la sudoración excesiva. La toxina paraliza el músculo que ayuda a contraer la glándula sudorípara y por ende el paciente no sudará”, anotó.
Nieto manifestó que el efecto de este tratamiento dura de 8 meses a un año, y que en generalmente al paciente le va bastante bien.
Finalmente existe el tercer tipo de tratamiento que está dirigido a aquellos pacientes que siguen sufriendo de sudoración excesiva o hiperhidrosis recalcitrantes, pese a haberse aplicado productos tópicos o haber sido sometidos a la toxina botulínica.
“Esa es la cirugía. Lo hace el cirujano cardiovascular porque significa cortar la rama del nervio simpático que va hacia esas zonas para evitar que estimule la contracción del músculo y, por ende, se produzca el exceso de sudoración”, aseveró.
Advirtió, sin embargo, que este tipo de cirugías pueden generar que se deje de sudar en el área intervenida, pero se manifiesta la hiperhidrosis en otra parte del cuerpo.
Dijo que la hiperhidrosis se manifiesta generalmente en las estaciones más cálidas del año y ataca a todas las personas, independientemente de su edad o sexo.
Nieto recomendó a las personas que sufren de hiperhidrosis por estrés o ansiedad que realicen actividades que las relajen como ejercicios o escuchar música que les agrade.
“Si la sudoración es en las axilas tratar de usar ropa de algodón, no ropa muy apretada. Si (la sudoración) es en los pies evitar estar con los zapatos cerrados todo el tiempo. Si usan zapatos cerrados por temas de trabajo tener por lo menos dos pares de zapato para cambiarse porque eso también se puede acompañar con bromhidrosis, que es el exceso de sudoración más el mal olor”, explicó.
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