La vocera de la Comisión Multisectorial del Estudio Nacional del Fenómeno El Niño (Enfen), Rina Gabriel Valverde, precisó que el descenso del nivel de agua en el lago Titicaca, en la región Puno, no está vinculado directamente al calentamiento de la temperatura, presencia del Niño Costero o el eventual Niño global, sino a diversos factores de procesos anteriores como La Niña.
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Este descenso en el nivel del Titicaca no viene del calentamiento actual o del Niño, este debilitamiento se registra desde temporadas atrás como la Niña costera", puntualizó Gabriel Valverde en una entrevista en
Tv Perú, en la cual se abordó el último comunicado el Enfen (C
omunicado Oficial ENFEN N°14-2023) respecto a El Niño costero.
Allí se señala que entre setiembre y noviembre, los caudales y niveles de los principales ríos del país presentarían valores entre debajo de lo normal y normal; mientras que en la zona noroccidental habrían caudales por encima de lo normal hacia diciembre y enero.
Sobre el nivel del lago Titicaca se indica que continuaría una tendencia descendente y que los caudales de los principales ríos afluentes al lago presentarían un comportamiento por debajo de lo normal.
Sobre la sequía debido al calentamiento del mar, la vocera del Enfen aclaró que ello no quiere decir que no va a haber agua o que habrá un déficit total de agua, sino déficit de precipitaciones que afectará la disponibilidad del recurso hídrico en la zona suroriental del país.
Al referirse a la labor del Enfen, refirió que el monitoreo sigue siendo continuo de las condiciones oceáno atmosféricas no solo solo a escala nacional sino también regional, dentro de la cuenca del Pacífico tropical y que los cambios de temperatura conllevan impactos en el Perú.
Sobre las lluvias de los últimos días, mencionó que ello es parte de las condiciones que se están presentando en este invierno debido a los vientos del sur, pero que no representa que baje la temperatura del mar o enfríe el calentamiento que tenemos en la actualidad.
"Lo único que han hecho estos vientos es enfriar un poco las temperaturas del océano, es decir es temporal y no cambiará la actual temperatura en el mar", expresó al señalar que se mantiene el estado de “Alerta de El Niño Costero” y continuará hasta el verano de 2024, como consecuencia de la alta probabilidad que se desarrolle El Niño en el Pacífico central, con magnitud moderada.
Agregó que como consecuencia de esos pronósticos, habrá un fuerte impacto de lluvias en el norte del país, pero también en la Costa central y precipitaciones por debajo de lo normal en la zona andina sur del país, tal como señala el último comunicado del Enfen.
Rina Gabriel manifestó, además, que el aumento de la temperatura en el mar tendrá impactos en los recursos marinos como la anchoveta, que de acuerdo a los reportes recibidos, se ha replegado (alejado) de la Costa y se ha profundizado.
"Eso significa que las embarcaciones pesqueras tendrán que hacer mayor esfuerzo en equipos y costos económicos", remarcó la vocera del Enfen al manifestar que si bien aparecen otros recursos de aguas cálidas, estos no reemplazan a la anchoveta.
Lluvias y vulnerabilidad
Respecto a los impactos de las lluvias y las medidas de seguridad, Gabriel Valverde, precisó que el Centro Nacional de Estimación, Prevención y Reducción del Riesgo de Desastres (Cenepred) ha elaborado escenarios de riesgos con información del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi), en función de la vulnerabilidad de diversas zonas.
En ese contexto, añadió que el norte del país es vulnerable porque no se han tomado las medidas de prevención y de allí la importancia de que cada sector y gobiernos locales y regionales conozcan las vulnerabilidades de sus zonas para tomar las medidas de prevención.
Afirmó que después de las lluvias vienen las inundaciones, plagas y otra serie de situaciones, por lo que cada sector tiene que estar preparado para afrontar esas situaciones de manera multisectorial.
(FIN) JCB/TMC
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Publicado: 17/9/2023