El Ministerio de Salud (Minsa) advierte que el sarampión es un virus que puede causar serios problemas de salud como diarrea intensa, infecciones del oído, neumonía, ceguera, encefalitis y, en el peor de los casos, hasta la muerte en niños que no han sido vacunados contra la enfermedad.
La vacuna SPR (sarampión, paperas y rubéola) es la única manera de prevenir dichas complicaciones. El Minsa la aplica gratuitamente en todos los establecimientos de salud públicos del país y, actualmente, por el barrido nacional de vacunación contra el sarampión, el personal de salud está aplicando una dosis adicional a niños y niñas de 1 a 6 años.
Martha Vargas Machuca Castrillón, de 60 años, es una madre de familia, empresaria y dirigente de personas con discapacidad que vive con las secuelas del sarampión. Cuando tenía 3 años se contagió del virus y debido a las complicaciones de salud que le causó la enfermedad, Martha quedó con sordera profunda y dificultad para hablar.
Pasó más de 10 años en rehabilitación y a pesar de estar sorda, Martha mejoró su comunicación verbal. Sin embargo, debido a su discapacidad no pudo estudiar como hubiera querido, no podía socializar y tuvo dificultades para encontrar trabajo porque las personas no entendían lenguaje de señas.
“Cuando era niña no había vacuna contra el sarampión en el país, ahora que sí hay, le recomiendo a los padres que vacunen a sus hijos para que no queden con la discapacidad que yo tengo, ni vivan las dificultades que yo tuve”, comentó Martha, quien actualmente preside una organización llamada Carife Perú que promueve el cumplimiento de los derechos de las personas con discapacidad.
Mediante su lucha por el respeto a las personas con discapacidad, Martha también transmite el mensaje de la importancia de las vacunas a los padres de familia y los exhorta a cuidar la salud de sus hijos mediante la vacunación. Cuenta que si ella hubiera tenido acceso a la vacuna contra el sarampión, su historia hubiera sido totalmente diferente.
El Minsa pide a los padres de familia que firmen el consentimiento informado para que sus hijos sean vacunados en los colegios o, de lo contrario, acompañarlos el día de la vacunación o llevarlos al establecimiento de salud más cercano.
Asimismo, brigadas de vacunación en todo el país siguen movilizándose casa por casa en busca de niños para vacunarlos.
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Publicado: 13/10/2024