A fin de reducir la tasa de infecciones, problemas de circulación venosa y disminuir las posibilidades de hospitalizaciones en pacientes con hemodiálisis, el Seguro Social de Salud ha empezado a implementar el uso de fistula en pacientes con casos de alta complejidad.
Al respecto, el doctor Edwin Castillo Velarde, jefe del Servicio de Nefrología del Hospital Nacional Guillermo Almenara, señaló que con la creación de las fistulas arteriovenosas se ha logrado bajar las complicaciones asociadas a estos pacientes.
“A través de una intervención quirúrgica se crea una fístula arteriovenosa que conecta la vena a la arteria. Luego de un período de maduración de aproximadamente seis semanas puede ser utilizada para lograr el suficiente flujo de sangre que vaya al dializador, donde se limpiarán sus toxinas y se eliminará el exceso de líquido para luego regresar al organismo del paciente, pero ya purificada”.
El acceso vascular es la puerta de entrada para iniciar el proceso de purificación de la sangre en pacientes cuyos riñones no se encuentran en capacidad de eliminar toxinas.
En el pasado este proceso no era tan sencillo como colocar una vía endovenosa. Sin embargo, este procedimiento garantiza una mayor sobrevida en el paciente.
El experto comentó que con este programa se busca lograr que siete de cada diez pacientes con enfermedad renal crónica avanzada o hemodiálisis cuenten con este acceso vascular (fistula).
Es importante que una persona con enfermedad crónica renal avanzada evite exponerse a infecciones, sobre todo ante esta coyuntura que reduce las posibilidades de ser hospitalizado.
“El servicio de hemodiálisis del hospital Almenara continúa trabajando de forma sostenida manteniendo los protocolos vigentes”, recordó el galeno.
Más en Andina:
(FIN) NDP/KGR
GRM
Publicado: 29/7/2021