La grandeza del Vultur gryphus o cóndor andino ha inspirado poemas, cantos y personajes en la literatura y el cómic. Presente en la iconografía de las culturas andinas, en el vuelo del pensamiento mágico-religioso y en la ficción (donde inclusive se le ha elevado hasta tocar el sol y dormir entre las estrellas).
A la vez, en nuestro país el cóndor andino ha sido categorizado como una especie en peligro de extinción. A escala internacional, el Vultur gryphus está protegido por la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestre (Cites) y por la Convención para la Conservación de Especies Migratorias (CMS), de las cuales Perú forma parte.
Los roles del cóndor
Los cóndores cumplen un rol vital debido a que se alimentan de animales muertos, manteniendo limpios los paisajes silvestres. Los cóndores son grandes indicadores de la salud ecológica en los paisajes abiertos que habitan.
Además, su presencia impulsa actividades productivas, como el ecoturismo, y contribuye con la economía y el desarrollo de las comunidades locales.
Trabajo de campo
La muestra fotográfica “De la costa a los Andes peruanos”, organizada en la ciudad del Cusco por el Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor) del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego, permite apreciar al ave emblemática en los distintos ecosistemas donde vive.
Además, la exposición, que se presenta en la galería de la Fundación Culturl del Banco de la Nación del Cusco (esquina de avenida El Sol con calle Almagro), permite conocer cómo fue el trabajo de campo de los equipos de evaluación que trabajaron en el Primer Censo Nacional del Cóndor Andino.
Para tener la data más fidedigna, los censadores acamparon a la intemperie y madrugaron, hicieron vigilias, caminaron por pendientes. Solo de esta manera siguieron la ruta del cóndor, que va desde el mar hasta donde llegan en busca de alimentos, y luego verlos volar a los 5,500 metros de altura.
Los resultados del censo
Ahora, a comienzos de diciembre el Serfor dio a conocer los resultados del Primer Censo Nacional del Cóndor Andino, que se desarrolló de manera simultánea en 38 provincias de 16 departamentos (Áncash, Apurímac, Arequipa, Ayacucho, Cajamarca, Cusco, Huancavelica, Ica, Junín, Lambayeque, Lima, Moquegua, Piura, Puno, San Martín y Tacna). Permitió registrar un total de 301 ejemplares. El punto de partida para futuras acciones para la conservación de esta especie.
Se trata, como señalan los especialistas, de un punto de partida para las proyecciones de la población del cóndor andino en el Perú. Además, permitió conocer los hábitos de esta ave, las amenazas que se ciernen sobre él y los sitios prioritarios para su conservación. El censo registró que los departamentos con el mayor número de cóndores andino fueron: Ayacucho (77 individuos), Arequipa (62), Apurímac (36), Lima (28), Ica (25) y Cusco (23), los demás departamentos censados tuvieron entre 10 y cero individuos contados.
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