La ciudad de Chiclayo se prepara para recibir una nueva obra de arte público que promete convertirse en un ícono turístico y religioso de la región Lambayeque: la escultura monumental del papa León XIV, de 5 metros de altura, elaborada en fibra de vidrio y montada sobre un pedestal de 2 metros.
El proyecto, impulsado por el Gobierno Regional de Lambayeque a través de la Gerencia Regional de Comercio Exterior y Turismo, fue encargado al escultor chiclayano Juan Carlos Ñañaque Torres, quien junto a un equipo de seis personas trabaja desde hace más de tres meses en la pieza, que ya tiene un 90 % de avance.

“Estoy muy agradecido de que hayan confiado en mi persona para esta obra. Hemos trabajado con dedicación y esfuerzo para lograr el 100 %. Ya estamos en la etapa final y este mes se entregará oficialmente”, señaló Ñañake.
La escultura, elaborada en fibra de vidrio reforzada, ha sido diseñada para resistir las condiciones del clima local: sol, viento, arena y humedad. En un inicio se evaluó la posibilidad de hacerla en bronce, pero el alto costo y el tiempo de fundición que implicaba llevaron a optar por el material más ligero y duradero.
La ubicación elegida es estratégica: en la entrada de Chiclayo, a la altura de la carretera Panamericana Norte (zona sur) y el óvalo de Evitamiento, donde dará la bienvenida a los visitantes y fieles que ingresen a la ciudad norteña.
Ñañake destacó también el trabajo de su equipo, que ha sido parte fundamental del proceso creativo y técnico. El escultor recordó que en el pasado lideró proyectos de envergadura, como el mural de 2,000 metros cuadrados elaborado hace más de una década junto con 18 artistas.
Con la nueva obra monumental, Chiclayo no solo rinde homenaje al papa León XIV, sino que también refuerza su identidad cultural y religiosa, y se consolida como un nuevo atractivo para el turismo regional, nacional e internacional.
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(FIN) SDC/JOT