A una altitud de 1,640 metros sobre el nivel del mar se ubica la finca “Bella Siempre Viva”, un lugar extraordinario del distrito de Alto Inambari, el paraíso terrenal de Norman Choque Cuno, el mentor de la marca café Candelaria, que en la víspera obtuvo el quinto lugar en el concurso nacional de “Taza Excelencia”.
Norman Choque, es el agricultor líder y extensionista de proyectos de cafés especiales de altura, el pasado año su café ya obtuvo un reconocimiento especial en Francia, eso le motivó a trabajar con mayor ahínco, logrando que su café esté entre los cinco mejores del Perú.
Sin embargo, prefiere mantener su perfil bajo, cree que aún hay mucho por hacer y eso esta por venir, “con humildad y trabajo siempre se consigue grandes cosas”, refiere Norman, en una entrevista vía teléfono.
En la pequeña charla que tuvimos, el laureado caficultor narró sobre los retos que viene por delante, primero tiene en mente procesar sus productos en café tostado y molido, eso le permitirá obtener mayores ganancias, y en segundo lugar ampliar las áreas de cultivo para eso requerirá el apoyo del Estado.
En la actualidad cuenta una hectárea y media de café, con una producción anual promedio de 35 quintales por hectárea, y los comercializa en grano pergamino, por cuyas ventas recibe entre 250 hasta 500 soles por quintal.
“Los clientes cada vez son exigentes y uno tiene que ver que café tiene precio, eso depende mucho del manejo técnico para obtener sabor y acidez”, explica sobre los detalles que uno debe tener para cultivar el preciado grano.
Choque afirmó que a mayor altitud existe mejores condiciones para obtener un buen café y tiene un mejor precio. Citó como ejemplo, el catimor, que se adapta en cualquier suelo y es resistente a las enfermedades y es de alta productividad.
Pero también, aclara que el problema es que se adapta solamente a nivel de 800 metros sobre el nivel del mar, al cliente no le llama la atención porque no tiene aroma ni acides, su costo es de 250 soles el quintal, mientras que el bourbón, la geisha y la típica su costo bordea por los 500 soles el quintal.
Por último, agradeció a la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida), la entidad del Estado que interviene en la Amazonia de Puno, que a través de los municipios ejecuta proyectos de desarrollo alternativo para fortalecer el cultivo de café.
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