Pobladores de 35 comunidades indígenas amazónicas de Chanchamayo fueron atendidos en las dos primeras semanas de setiembre por brigadas amazónicas del Ministerio de Salud (Minsa) que se internaron en las zonas más inaccesibles de esa provincia de la región Junín.
Con
insumos médicos y concentradores de oxígeno en los hombros, los
brigadistas de salud llegaron a estas comunidades para atender a los pacientes con coronavirus que presentaron síntomas de insuficiencia respiratoria. En total aplicaron 611 pruebas serológicas.
Los
médicos, enfermeros y técnicos laboratoristas que conformaron las brigadas contaron con el apoyo de pobladores indígenas que hicieron el enlace con cada una de las
comunidades nativas atendidas.
Los pacientes con SARS-CoV-2 que viven en las zonas más alejadas de la región Junín fueron atendidos con los concentradores de oxígeno, que son más fáciles de trasladar que los balones.
Intervención en comunidad Bajo Chiriani
En la comunidad indígena de Bajo Chirani, ubicada en el distrito de Perené, en la provincia de Chanchamayo, el
personal de salud del Minsa atendió a más de 40 familias asháninkas, a quienes también se les explicó las medidas preventivas que deben seguir para evitar la propagación del coronavirus en la zona.
“Hemos recibido charlas sobre los síntomas del coronavirus, y el personal de salud nos ha hecho pruebas rápidas a hombres y mujeres en Bajo Chirani. También nos han dado el tratamiento para combatir la enfermedad”, indicó el tesorero de la comunidad, Manrique Martínez, de 67 años, quien hace unos días superó la enfermedad, tras recibir el tratamiento y cumplir la cuarentena respectiva.
Precisó que, con los recursos transferidos para la implementación del “Plan de intervención del Ministerio de Salud para comunidades indígenas y centros poblados rurales de la Amazonía frente a la emergencia de la covid-19”, la Red de Salud Chanchamayo adquirió 70,000 barras de jabón, que son repartidos en las comunidades indígenas de Bajo Chirani, Bajo Aldea y Bajo Incariado.
Durante la visita a la comunidad indígena Bajo Chiriani, además de la realización de las pruebas rápidas a los pobladores, también se brindó consejería sobre el VIH y otras infecciones de transmisión sexual.