¡Atención! Conoce 4 formas de potenciar la gestión y el liderazgo en tu empresa

Con la aplicación de la neurociencia y el coaching

Un buen liderazgo se traduce en el incremento de la productividad de la empresa. ANDINA/Difusión

Un buen liderazgo se traduce en el incremento de la productividad de la empresa. ANDINA/Difusión

05:00 | Lima, set. 4.

Hoy más que nunca, el liderazgo empresarial se juega en la mente de quienes dirigen. No basta con conocimientos técnicos o experiencia: un líder que no sabe regular su estado interno termina tomando decisiones apresuradas, comunicando desde la tensión y transmitiendo desgaste a su equipo.

Según un estudio de McKinsey, en América Latina el 59% de los ejecutivos considera que el estrés de los líderes impacta directamente en la productividad de sus equipos.

En ese sentido, para José Cueto, fundador y director de Latam Coaching Network (LCN), integrar neurociencia y coaching no es un discurso motivacional, sino una metodología práctica para transformar la calidad de la gestión: líderes que deciden con más claridad, equipos que fluyen en sus roles y culturas organizacionales más sostenibles. 

“El estado interno —la combinación de emociones y pensamientos que dominan al líder— es determinante para decidir con inteligencia. Si el líder automatiza pensamientos limitantes, termina arrastrando al equipo hacia reacciones impulsivas. Cuando aprende a entrenar su mente, esas decisiones se vuelven más serenas y efectivas”, agrega.

A partir de este enfoque, el especialista comparte cuatro claves concretas para aplicar neurociencia y coaching en las organizaciones:

1.Comunicación que reduce fricciones reales


El cerebro filtra la información con sesgos que distorsionan lo que se escucha y se dice. Cuando un líder aprende a reconocer esos sesgos y entrenar la escucha activa, las conversaciones cambian de inmediato. No se trata solo de “comunicarse mejor”, sino de evitar decisiones costosas derivadas de malos entendidos. 

En empresas de servicios financieros que aplicaron coaching con enfoque neurocientífico, las reuniones redujeron en un 30% las fricciones innecesarias, liberando tiempo y energía para lo estratégico.

2.Decisiones desde un estado interno regulado


Un líder que respira, observa sus sesgos y automatiza pensamientos de enfoque logra ver con mayor amplitud los escenarios. En comités de dirección, esta práctica está evitando inversiones impulsivas y mejorando la priorización estratégica.

3.Liberar el talento natural y el flujo


Herramientas como el Talent & Flow Report (TFR) permiten ubicar a las personas en tareas donde naturalmente fluyen. En la práctica, esto se traduce en menos rotación, más compromiso y un mayor estado de flujo. Una firma tecnológica que aplicó el TFR reubicó a parte de su equipo de soporte en innovación, disparando motivación y creatividad.

4.Conexión y calidad en el liderazgo


La felicidad y el rendimiento sostenible dependen de tres niveles de conexión: consigo mismo (valores y salud), con los demás (relaciones y equipos) y con el entorno (propósito y contribución). Los líderes que trabajan estos tres niveles generan climas más resilientes y comprometidos.

Sin duda, cuando un líder regula su estado interno, automatiza pensamientos constructivos y conecta con propósito, no solo logra mejoras inmediatas en productividad, sino que construye sostenibilidad humana y empresarial.

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(FIN) NDP / MDV

Publicado: 4/9/2025