En el Perú ocurren al día alrededor de 100 casos de infartos de miocardio, una emergencia que consiste en la muerte de las células del corazón por falta de irrigación sanguínea.
Este fenómeno, comentó Torres, es cada vez más frecuente por factores como el sedentarismo, la práctica de dietas poco saludables, el consumo de tabaco, alcohol, vapeo y bebidas energizantes.
Sostuvo que estas conductas aceleran la aterosclerosis y aumentan el riesgo de infarto incluso en personas jóvenes.
Torres Vega recomendó controles médicos preventivos a partir de los 40 años, mantener una alimentación equilibrada, hacer ejercicio de manera regular, evitar el estrés y respetar los horarios de sueño. “La medicina preventiva es la más eficiente y hasta la más económica”, señaló.
El especialista recordó que los síntomas de alerta —dolor de pecho, falta de aire, mareos o cansancio extremo— requieren atención inmediata en un centro de salud para salvar vidas y reducir secuelas.
Cabe indicar que si bien el infarto y el paro cardiaco involucran al corazón, no son lo mismo: se suele confundir con un paro cardíaco, pero este representa el cese completo de la actividad del corazón. En este caso, el corazón no es capaz de bombear y el paciente tiene una muerte súbita.
La Sociedad Peruana de Cardiología ha señalado que los infartos agudos al miocardio son una de las emergencias médicas más frecuentes en el país, ya que una tercera parte de los pacientes que presentan este mal, fallecen en sus hogares o en camino a atenderse porque no lo reconocen a tiempo.
Más en Andina: