La Municipalidad de San Isidro multará con 154 nuevos soles el uso indebido del claxon por parte de los conductores de vehículos públicos y privados que se desplacen por las avenidas y calles de ese distrito.
Voceros de la comuna señalaron que desde mañana lunes y por espacio de 30 días se realizará una intensa campaña informativa sobre esta medida que incluirá la imposición de sanciones educativas. Esta actividad forma parte de la campaña “Vive sin ruido” que lleva a cabo la comuna.
La aplicación de las sanciones se hará efectiva a partir del próximo 15 de junio y estará a cargo de efectivos de la Policía Nacional del Perú con el apoyo de los inspectores municipales de tránsito de la comuna de San Isidro, anotaron.
Precisaron que si bien la aplicación de las multas se extenderá a todo el distrito, tendrá mayor incidencia en aquellas zonas ya identificadas como puntos críticos de contaminación sonora.
De acuerdo a los estudios y evaluaciones desarrolladas por especialistas de la Municipalidad de San Isidro, las zonas donde se superan los límites sonoros permitidos son los cruces de las avenidas Paseo de la República con Canaval Moreyra y Aramburú, Juan de Arona y Rivera Navarrete y Camino Real con el Óvalo Paz Soldán.
Ocurre lo mismo en las intersecciones de Javier Prado con Las Flores y Arenales, Salaverry y Del Ejército, Aramburú y Arequipa, Coronel Portillo y Pezet, Conquistadores con Choquehuanca, Nicolás de Rivera con Los Eucaliptos, República de Panamá con CanavalMoreyra, entre otras.
Según los límites permisibles de ruido, no se deben sobrepasar los 70 decibeles en zonas comerciales. Sin embargo, según la información recogida en el monitoreo, el promedio en San Isidro bordea los 100 decibeles.
Serios daños a la salud
La permanente exposición a los ruidos ocasionados por el uso indiscriminado de claxon y bocinas son considerados uno de los principales problemas de salud pública, pues producen desde problemas cardiovasculares y gastritis hasta la pérdida progresiva de audición, señaló el médico especialista de la Municipalidad de San Isidro, Julio Oscos.
Los ruidos también ocasionan deterioros psicológicos, al producir irritación y cansancio que provocan serias disfunciones en la vida cotidiana. El ruido afecta adversamente la atención, la resolución de problemas y la memoria.
"El ruido con niveles por encima de 70 decibeles puede potenciar el comportamiento agresivo, el estrés y generar problemas emocionales en las personas, tanto conductores como peatones", enfatizó el funcionario.
(FIN) LFP/LZD
Publicado: 10/5/2015