El ministro de Economía y Finanzas, Alonso Segura, abogó hoy en la cumbre internacional sobre cambio climático (COP20), por un mayor apoyo de los países desarrollados hacia los países en desarrollo, a fin de “desacoplar” el crecimiento económico de la emisión de gases de efecto invernadero.
Refirió que es necesario “asegurar recursos” para hacer frente a los impactos que genera el fenómeno del cambio climático y evitar que afecte la senda del crecimiento de los países en vías de desarrollo.
“Principalmente de aquellos que resultan más vulnerables a este fenómeno, el Perú es especialmente sensible al cambio climático, es el cuarto país más vulnerable, según estudios internacionales”, dijo.
En su intervención en el diálogo ministerial sobre financiamiento climático, que se desarrolla en la Vigésima Conferencia de las Partes (COP20), enfatizó que los efectos de este fenómeno ya se sienten en Perú en los deshielos de los glaciares y en el aumento de la intensidad del Fenómeno del Niño, entre otros.
Por ello, precisó que el objetivo de los países en desarrollo debe ser lograr economías “resilientes” al cambio climático, que generen bajas emisiones, que logren un mejor uso de los recursos y que también puedan enfrentar los costos de las medidas de adaptación y mitigación.
“Este objetivo que implica desacoplar el crecimiento económico de las emisiones de gases de efecto invernadero, requiere contar con el apoyo decidido de los países desarrollados”, subrayó.
Recordó que si bien han existido diversos mecanismos financieros tales como el Global Environmental Facility, el fondo de adaptación y el uso de mecanismos de mercado, estos esfuerzos requieren ser complementados con fuentes de recursos a largo plazo.
“Hoy se requiere contar con el compromiso y ambición de los países desarrollados para movilizar 100 mil millones de dólares hasta el 2020, con el fin de financiar la acción climática en países en desarrollo”, agregó.
En ese sentido, dijo que se requiere continuar consolidando y fortaleciendo la arquitectura financiera y “hacerla más flexible” a las necesidades de los países, de manera que se pueda implementar mecanismos que correspondan a una economía baja en carbono, que cada país debe implementar”, precisó.
Medidas a tomar
En ese contexto, destacó que existen diversos aspectos que deben ser considerados con miras a asegurar el financiamiento a largo plazo, como “mejores medidas operacionales” que permitan el acceso a recursos financieros predecibles y sostenibles.
También, el acceso al apoyo financiero y técnico para la creación de capacidades en la evaluación de los costos de adaptación y mitigación en los países en desarrollo, a fin de determinar necesidades financieras y fortalecer capacidades para el uso del Fondo erde para el clima.
Entre otras medidas de transparencia, pidió “una representatividad equilibrada” dentro de los esquemas de gobernanza, garantizando una participación equitativa entre países desarrollados y en desarrollo.
Finalmente, propuso promover la participación del sector privado para aumentar los recursos que permitan contribuir al financiamiento climático.
“Si bien tenemos un camino por trabajar, no debemos perder de vista que el cambio climático es un problema que trasciende fronteras, por lo cual requiere la participación y colaboración de todos los presentes, en la medida que sus capacidades así lo permitan”, puntualizó.
(FIN) MDV/FHG
Publicado: 9/12/2014