El presidente de la República, Martín Vizcarra, pidió hoy a toda la población adoptar una cultura de prevención ante posibles desastres naturales a los que el país está expuesto.
Consideró necesario que esa cultura empiece desde los propios ciudadanos quienes a su juicio deben tomar las medidas necesarias para reducir los riesgos ante eventuales sismos o desastres generados por el clima.
Por ejemplo, destacó la importancia de que todas las familias del país cuenten con la
mochila de emergencia para afrontar sismos y eviten construir sus viviendas en las quebradas por ser zonas altamente vulnerables a deslizamientos, entre otras medidas.
“Llamamos a la responsabilidad, depende de nosotros que no se den estos resultados”, manifestó al recordar a los miles de muertos que causó en Yungay un aluvión generado tras el terremoto de 1970.
El jefe del Estado subrayó que todos los ciudadanos deben recordar la
tragedia de Yungay como ejemplo para reflexionar y trabajar de forma responsable, de la mano con las autoridades.
“Ya no queremos contar más muertos, pero depende la cultura de prevención. Sabemos que tarde o temprano vamos a tener un nuevo sismo o una nueva inundación o un nuevo huayco, preparémonos, seamos responsables”, reflexionó.
Igualmente, hizo un llamado a los alcaldes y distintas autoridades a fin de planificar correctamente la expansión de las ciudades, considerando criterios de seguridad y evitando las zonas de riesgo.
A las 10.00 horas, Vizcarra suspendió su actividad oficial para acatar las disposiciones de seguridad de los coordinadores del simulacro.
El jefe del Estado llegó a Yungay para participar en la ceremonia de homenaje a los fallecidos en el terremoto de 1970, que prácticamente borró del mapa a esta localidad.
Dicho movimiento sísmico provocó el desprendimiento de una gran masa de hielo del nevado Huascarán, la cual cayó en la laguna Llanganuco. La fuerza del derrumbe ocasionó un aluvión que en minutos borró prácticamente del mapa la ciudad de Yungay, la cual estaba mal ubicada en el cauce de una quebrada.
La tragedia dejó más de 20,000 mil víctimas mortales solo en Yungay.
El primer mandatario explicó que decidió viajar a esta ciudad para participar en el simulacro de sismo como un gesto simbólico de homenaje a las víctimas de esa tragedia, pero también como mensaje de la necesidad de tomar las medidas para prevenir este tipo de desastres.
“Desde el extremo norte al extremo sur, pasando por Costa, Sierra y Selva, los peruanos tenemos que ser responsables ante los retos de la naturaleza”, comentó.
“Hoy 31 de mayo, en Yungay, asumimos juntos con toda la población el compromiso de generar una cultura de prevención (…)”, agregó.
El jefe del Estado viajó a esta localidad de Áncash acompañado de ministros de Estados, congresistas y altos funcionarios del Estado.