Lucía Hiriart, la viuda del fallecido dictador chileno Augusto Pinochet, negó al juez que la interrogó el pasado 14 de diciembre haberse apropiado de bienes o haber malversado fondos de una Fundación que presidía, según publica este jueves el diario El Mercurio, que accedió a su declaración.
"Por mí no pasaba ni un centavo de Cema Chile", aseguró Hiriart al juez Guillermo de la Barra, que la interrogó como imputada por presuntos delitos de apropiación de bienes y malversación de fondos de Cema Chile, una fundación benéfica de la que su marido la designó presidenta perpetua durante la dictadura (1973-1990).
Además, Pinochet le cedió a la Fundación 135 inmuebles y terrenos fiscales que, según se supo el pasado abril, comenzaron a ser vendidos o arrendados a terceros sin conocerse el destino de los dineros recibidos a cambio.
Hiriart, de 94 años, aseguró en su declaración que esas operaciones se llevaron a cabo "para poder financiar las actividades de Cema Chile; todos los dineros producto de esas ventas volvieron al patrimonio de Cema Chile".
"Nunca se distrajeron esos dineros para fines particulares ni míos ni de mis familiares. Tampoco para algún integrante de la junta directiva. Todos los dineros fueron entregados a Cema Chile. Por mí no pasaba ni un centavo", sostuvo.
La investigación judicial apunta a actos de apropiación indebida y malversación de fondos de Cema Chile por parte de familiares y cercanos de Pinochet por unos 12.000 millones de pesos (unos 18 millones de dólares), a través de venta de inmuebles y terrenos entregados a Cema Chile para sus actividades benéficas.
También a 50.000 dólares sacados de la Tesorería de la Fundación para financiar gastos relacionados con la detención de Augusto Pinochet en Londres, que se extendió entre octubre de 1998 y marzo de 2000.
Hiriart reconoció esto último, pero afirmó que "no lo necesitaba y fue devuelto íntegramente. En todo caso, yo jamás lo solicité".
Acerca de dos préstamos de dinero de la Fundación a la familia Pinochet, uno de ellos a su hija Jacqueline, dijo que "no recuerdo detalles, pero si se le prestó alguna suma de dinero, debió haberse devuelto por ella".
"Yo me retiré de Cema Chile por motivos de salud, se me hacía muy difícil cumplir con funciones en la fundación. Pero creo que se trata de una institución muy organizada y con un voluntariado muy fuerte", comentó.
Preguntada si la entidad debe seguir funcionando, dijo que "eso es algo que deben decidir quienes actualmente se encuentran a cargo de ella".
"Se lava las manos como Pilatos", comentó el diputado comunista Hugo Gutiérrez, querellante en el caso, respecto de la declaración de Lucía Hiriart.
"Son préstamos que no correspondían ser otorgados por esta institución y no hay constancia de que esas entregas de dinero, particularmente lo que significó la defensa de Pinochet, hayan sido reintegrados", dijo Gutiérrez a radio Cooperativa.