La Defensoría del Pueblo demandó a Sedapal el pronto restablecimiento del servicio de agua potable en San Juan de Lurigancho y pidió también garantizar a la brevedad posible la culminación de las obras de saneamiento en la zona.
La adjunta para los Servicios Públicos de la institución, Lissette Vásquez, informó que, dada la gravedad del problema, la Defensoría realizó en la víspera una supervisión en los lugares afectados, a fin de verificar que Sedapal garantice la provisión de agua a través de camiones cisterna hasta que culminen los trabajos necesarios para la reposición del servicio.
Dijo que se requiere habilitar un número adecuado de camiones cisterna y puntos de entrega de agua, así como disponer medidas para evitar aglomeraciones y disturbios que puedan afectar las medidas sanitarias dispuestas por el estado de emergencia nacional.
Asimismo, la Defensoría consideró que Sedapal debe garantizar la pronta reparación de las tuberías que en enero del 2019 produjeron un enorme aniego y que ahora forman parte de los trabajos de reconstrucción y recuperación de las zonas afectadas.
“Alertamos con preocupación que, tras haber transcurrido casi tres años, no se ha culminado con estas obras. Es urgente que Sedapal y el Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento redoblen esfuerzos para corregir esta situación y garantizar el derecho humano al agua y la salud de la población de San Juan de Lurigancho”, señaló la representante de la Defensoría del Pueblo.
Recordó que la población vulnerable del distrito -gestantes, niños, personas con discapacidad o adultos mayores- es la más afectada por las condiciones de insalubridad y por la incertidumbre del restablecimiento de sus derechos más básicos.
Tras ello, invocó al Ministerio de Salud a disponer medidas para la inmediata atención y protección de la salud de la población expuesta a las aguas contaminadas, dado el riesgo de contraer enfermedades.
Adicionalmente, la Defensoría del Pueblo recordó a la empresa la importancia de cumplir con compensar a las personas afectadas, tomando en consideración los daños ocasionados por el aniego, las afectaciones a la salud, y las consecuencias de la falta de disponibilidad del recurso hídrico dentro de sus viviendas.
La Defensoría del Pueblo continuará, en las próximas horas, supervisando y formulando recomendaciones, a fin de contribuir al restablecimiento de los servicios de agua y saneamiento en las zonas afectadas, y a la pronta culminación de las obras pendientes.