Alrededor de unos 200 a 300 policías ingresaron hoy al campus de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos para desalojar a numerosos manifestantes que pernoctaban en el lugar desde hace tres días.
Con apoyo de una tanqueta o vehículo multipropósito derribaron una de las rejas de entrada al campus universitario, para dar pase a los agentes del orden que portaban escudos y cascos.
El ingreso del vehículo provocó la caída de uno de los muros de ingreso de la casa universitaria.
Los agentes emplearon gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes que se encontraban cerca de las puerta de entrada número 3 de la ciudad universitaria.
Diversos camiones de personal policial, así como patrulleros permanecen apostados en los alrededores de la ciudad universitaria. Durante varios minutos se observó el sobrevuelo de un helicóptero de la Policía.
En el interior de la universidad se podía apreciar una gran cantidad de víveres para los manifestantes venidos desde diversas regiones del país, especialmente de las zonas del sur.
La policía desplegó un gran cordón de seguridad para tomar control de los interiores de San Marcos. Posteriormente, procedió a confiscar y destruir todas las banderolas y material de protesta instalados en las paredes de ingreso al recinto universitario.
Durante la operación policial se intervino a más de 200 personas que han sido derivadas a la sede de la Dirincri y Dircote para posteriores investigaciones.