A sus cortos veinte días de vida y con un peso de 3.8 kilos, un bebé procedente de Chimbote, logró ser sometido a una cirugía de alto riesgo a corazón abierto para corregir una cardiopatía congénita grave a cargo del equipo multidisciplinario de cirugía cardiovascular del Instituto Nacional de Salud del Niño San Borja.
Se trata del paciente más pequeño sometido a una cirugía cardiovascular compleja durante esta crisis sanitaria nacional por
covid-19.
El cirujano cardiovascular, Martín Bedoya Rivera, dijo que el pequeño Jesús M.G. llegó a la institución con el diagnóstico de transposición de grandes vasos, un defecto cardíaco poco frecuente en el que los grandes vasos (arteria pulmonar y aorta) que nacen del corazón están conectados de manera inversa con los ventrículos (cavidades que bombean sangre del corazón a todo el cuerpo) provocando el anormal flujo de los pulmones y la circulación sistémica, impidiendo que la sangre sea transportada de forma normal desde el corazón hacia el resto del organismo.
El especialista explicó que la
enfermedad del pequeño Jesús hizo que desarrollara cianosis (coloración azul de la piel a causa de una mezcla anormal de la sangre venosa y arterial) de forma temprana, lo cual disminuye la saturación de
oxígeno en la sangre poniendo en riesgo la vida del bebé.
De inmediato, el equipo cardioquirúrgico del INSN San Borja, cumpliendo con todos los protocolos de bioseguridad y utilizando equipos de última generación programó una cirugía compleja mediante la técnica switch arterial o cirugía de Jatene, que consiste en conectar los grandes vasos del pequeño corazón del bebé con su respectivo ventrículo, es decir restituir la anatomía del paciente y poner cada arteria en su sitio a fin de lograr que la sangre llegue de forma correcta hacia todo el cuerpo. La cirugía duró cerca de cuatro horas.
“Gracias al trabajo conjunto del equipo de cardiología, anestesiología, cirugía cardiovascular, pediatras intensivistas, enfermeras y técnicas de enfermería se brindó el mejor tratamiento a su llegada a la capital desde Chimbote y la cirugía de alta complejidad ha permitido que el bebé tenga una oportunidad de vida”, destacó.
La gestión no ha postergado las operaciones quirúrgicas durante la
crisis sanitaria nacional y en lo que va del año 2021 se realizaron 143 cirugías cardiovasculares logrando salvar la vida de estos pequeños provenientes de las diversas regiones del país.
La jefa de Cardiología y Cirugía Cardiovascular del INSN San Borja, Eneida Melgar Humala, sostuvo que al año nacen 5 mil niños con problemas del corazón en el Perú, de los cuales el 80% necesita una operación temprana para salvar su vida.
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(FIN)NDP/NJC/RES