El presidente José Jerí Oré aseveró que su compromiso es dejar un camino tranquilo y propicio para su sucesor y enfatizó la importancia de establecer las condiciones necesarias para que las futuras decisiones gubernamentales sean óptimas.
“Mi labor es esa, dejarle el camino tranquilo, en lo más cercano a la tranquilidad plena para nuestro país con las condiciones para que el que venga tome las mejores decisiones. Ese es mi único trabajo, yo soy el puente”, agregó el mandatario.
El jefe del Estado añadió que su expectativa “es dejar el país en tranquilidad”. “Ese es mi principal legado: dejar varias cosas encaminadas, como hemos anunciado en varias oportunidades. Las herramientas que encontramos al asumir, además de enfrentar una criminalidad en ola creciente, lamentablemente no eran suficientes”, manifestó.
Indicó que su gobierno ha comenzado a “ordenar la casa” y al hacerlo se dieron cuenta que todo lo que les faltaba. Además, frente a los índices de extorsión, dijo que, aunque algunos sectores capitalizan políticamente esa problemática, “es imposible” desconocer una realidad heredada.
“Yo no estoy desconociendo la realidad; es imposible desconocer una realidad. Pero es una realidad que hemos heredado, y eso hay que tenerlo bien claro. Segundo, algunos sectores decían: ‘no tiene ningún plan’. Yo no tenía un plan al inicio porque no postulé para ser presidente de la República. Yo he asumido la responsabilidad, que es muy distinto”, afirmó.
Además, sostuvo que por diez años se tuvo información del sicariato y la extorsión en penales, pero "no se actuó”.
Al respecto comentó: “En el 2015, en el marco del Plan Nacional de Seguridad Ciudadana 2013-2018, se establecía que debía haber bloqueadores de señal de celular en los penales, porque ya se sabía que había un problema que podía desbordarse en ese momento (2013-2014). En ese contrato de concesión con la empresa privada […] todo estaba mapeado: el contenido y destino de las llamadas. Entonces, hemos administrado diez años de información en los que ninguna autoridad —más allá de un pedido judicial muy puntual y preciso— donde hemos tenido el origen de las extorsiones, el origen del sicariato frente a nosotros y no se ha querido actuar”, sostuvo.
Asimismo, el presidente Jerí anunció cambios en el Instituto Nacional Penitenciario (INPE).
“En enero se realizará la creación de superintendencia que reemplace la institución penitenciaria”, informó.
Además, opinó que no se puede exigir a la policía, si durante los últimos años no se le ha dotado de “prácticamente nada”.
En ese sentido, resaltó la buena voluntad en muchos elementos de la institución, incluso en los altos mandos, y enfatizó la importancia de darles las herramientas necesarias para actuar.
(FIN) CVC
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