09:16 | Lima, nov. 03 (ANDINA).
Una casona de ésas que se resisten a empalidecer con el paso de la modernidad y los años, en el centro de Cajamarca. Con un patio interior lleno de rosas y calma, con zaguán largo, tejados, techos altos y pisos crujientes, ha vuelto a abrir sus puertas para darle homenaje al legado de su morador más famoso, Mario Urteaga (1875-1957).
Estamos ante la memoria del artista plástico que supo darle un acento particular a la pintura indigenista peruana, combinando en su trazo autodidacta lo mejor de academicismo europeo con la tradición pictórica de la sierra norteña. (Sí, esta es tierra de pintores y Urteaga junto a su contemporáneo, el cajabambino José Sabogal, otro de las máximas del indigenismo y Cajamarca: una foto en la casa-museo, de ambos abrazados, muestra que hubo amistad y respeto).
Sí, luego de siete años de silencio, de acumular polvo y olvido, la casa-museo Mario Urteaga ha abierto sus puertas. Y el joven pintor Víctor Amado está a cargo. Cuenta que este esfuerzo de reapertura se debe a la familia del desaparecido creador, que han reunido las piezas para que la memoria de su vital ascendiente no desaparezca.
Han logrado reunir tres obras originales de Urteaga, bocetos originales como los de su famoso Rescate de Atahualpa. Hay muchas fotografías propias de la familia (una de las más tradicionales de la urbe norteña), y otras que narran el contexto de esos años en Cajamarca, antes del boom de la minería, adornando las paredes.
En los cuatro ambientes (distribuidos en espacios del primer y el segundo) también se pueden encontrar objetos propios del artista, como cajas de óleos, lavadero, repisas, sillones; notas periodísticas diversas en el Perú y el extranjero; un arpa de entonces y un baúl del propio pintor.
Víctor Amado explica que este museo no intenta ser un mundo en blanco y negro, al cual no llegan los sonidos de lo que sucede hoy. No. Se quiere que sea un espacio vivo, por ello se ha implementado una sala de exposiciones donde podrán exhibirse los actuales plásticos cajamarquinos, y Amado trabaja con alumnos de la escuela de arte Mario Urteaga para que continúen la labor del ilustre indigenista, de quien Teodoro Núñez Ureta declaró alguna vez que pintaba “los indios más indios que se han pintado”.
Datos
-1934. Año en que Urteaga hizo su primera exposición en Lima.
-1955. El Instituto de Arte Contemporáneo de Lima ofreció una exposición-homenaje al pintor.
-Ubicación. Jirón Dos de mayo 777, Cajamarca. Informes: 976478205
-Horarios. De Lunes a domingo de 13.00 a 21.00 horas.
(FIN) DOP
Publicado: 3/11/2009