Una escena de infancia al borde de un río, el ladrido entusiasta de un perro, los hermanos sentados alrededor de una mesa para la cena, situaciones que antes pasaban desapercibidas y que hoy, frente a la incertidumbre impuesta por la pandemia, cobran valor –de pronto– para convertirse en esperanza.
El artista plástico Jorge Vela ha querido rescatar de la fugacidad esos instantes valiosos y demostrar el error en la ecuación que compara e iguala la insignificancia y el precio. Y lo ha hecho por medio de los 28 cuadros de formato pequeño que componen la muestra ‘Pequeñas esperanzas’.
Dolor y consuelo
El título elegido por Vela para esta su segunda exposición virtual no es gratuito. Mientras avanzaba una de sus pinturas a mitad de año, él mismo se vio tocado por el covid-19. El virus afectó también a su hijo y se llevó, lamentablemente, a su hermana. Jorge pasó en cama cerca de dos meses.
“A quienes hemos sentido en carne propia el dolor de la pandemia, nos abrigan ahora, como consuelo, pequeñas esperanzas que se reflejan en la sonrisa de un hijo, en el beso que puedes darle a tu madre si sigue con vida, en dar una vuelta por el barrio y respirar con alegría”, reflexiona el artista.
En redes sociales
La muestra ‘Pequeñas esperanzas’ se inaugura hoy y estará abierta hasta el 30 de diciembre. Esta vez, la paleta de colores de Vela amplía sus opciones: dorados y platas se suman a los azules cerúleos, al rojo pasión, a la calidez del naranja; abundan los amarillos luminosos y el verde en todos sus tonos.
Es sorprendente que aun en tiempos de distancia social y mascarillas, el público y el arte busquen maneras de acercarse, opina el pintor. “A todos nos gusta el arte, quizás aún no lo sabemos”.
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(FIN) CCH
Publicado: 17/12/2020