La recomendación para implementar Oficinas de Integridad Institucional es para todo el Estado y todos los niveles de gobierno, lo cual incluye a los órganos jurisdiccionales, señaló Frédéric Boehm, analista de políticas públicas de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
“En principio nuestra recomendación aplica a todo el Estado y todos los niveles de gobierno. Lo que es cierto para el Poder Ejecutivo, lo es también para el Poder Legislativo y Poder Judicial”, precisó Boehm, coordinador del estudio Las Oficinas de Integridad Institucional en el Perú. Hacia la Implementación de un Sistema de Integridad.
En el caso del Perú, el Poder Judicial ha conformado una Comisión de Integridad y ha empezado a implementar medidas con el apoyo de la Secretaría de Integridad Pública de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM).
Los 19 ministerios del Estado cuentan con oficinas encargadas del tema de integridad institucional, mientras que solo dos gobiernos regionales han implementado estas dependencias.
El estudio de la OCDE reconoce la existencia de unidades anticorrupción y de ética en distintas entidades del Estado peruano, pero advierte que, en muchos casos con denominaciones, modelos de referencia y atribuciones diferentes.
Por ello, el informe analiza la normativa peruana y plantea recomendaciones para definir, adecuar y estandarizar el funcionamiento de las Oficinas de Integridad para la aplicación efectiva del Modelo de Integridad en todo el aparato público.
Boehm destacó que la implementación efectiva del modelo de integridad redundará en un buen servicio civil, cuyo funcionamiento es clave para el Estado, así como también en un correcto control interno en las instituciones.
Con la aprobación del Plan Nacional de Integridad y Lucha contra la Corrupción el 2018 se estableció un Modelo de Integridad para facilitar a las entidades una estructura de prevención de la corrupción y otras prácticas cuestionables en el sector público.
“La corrupción es uno de los factores que perpetúa las desigualdades. Luchar contra la corrupción, si uno piensa un desarrollo económico sostenible e inclusivo, es clave”, señaló el representante de la OCDE.
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