La población, el sector privado y la municipalidad de Machu Picchu trabajan en la habilitación de la “ruta del sol”, un exuberante camino de herradura y la autorización por el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp) del Ministerio de Ambiente.
Elvis La Torre Uñaccori, alcalde de este distrito, informó a la Agencia Andina, que están a la espera de la aprobación de un proyecto turístico y revertir la condición de restricción a este camino, para que accedan visitantes que se dirigen o retornan de la maravilla mundial.
Explicó que el lugar es fantástico para los amantes de la naturaleza, la flora y fauna de la zona, ya que se podrá ascender a los 2,833 metros sobre el nivel del mar, para contemplar la ciudadela Inca (2,430 msnm) desde lo alto, tras tomar el camino de unos 20 kilómetros que se dirige a Ccollpani.
Según detalló, Ccollpani está ubicado al final del distrito y cercano a los distritos de Santa Teresa y Huayopata, y es ideal para los visitantes que ingresan a la Ruta Amazónica de acceso a Machu Picchu.
“Desde esta montaña se ve Machu Picchu y otros atractivos más, como el imponente nevado del Salkantay y otros. Por ahora estamos a la espera de la autorización del Sernanp ya que amerita un estudio sobre la afluencia y el impacto en el ecosistema”, expresó el burgomaestre.
El camino de herradura al que se hace mención, es usado desde tiempos remotos para el traslado de productos agrícolas y frutales, y ahora solo se espera la viabilidad acorde a norma al ser un espacio protegido, limitante que esperan superar el primer trimestre del siguiente año. Para su aprobación y autorización, la autoridad edil envió informes y evidencias fotográficas.
“Desde San Gabriel se tiene una vista similar a la de la Montaña Putucusi (2,560 msnm) (desde donde se aprecia Machu Picchu para el lado oriental). Desde aquí ya es un poco más alto y se tiene una mirada más privilegiada de los alrededores”, explicó.
De ser aprobado el proyecto, la montaña de San Gabriel podría recibir hasta 500 visitantes, lo que ayudaría a descongestionar el parque arqueológico que mantiene a la fecha un debate sobre su capacidad de carga.
Los comuneros de Ccolpani se beneficiarían al ser una oportunidad de desarrollo. Al momento ya se organizan incluso para las visitas a una catarata ubicada a 15 minutos y hasta el sector privado habría decidido la construcción de un hotel amigable al ambiente natural.