Lambayeque fue escenario de un acontecimiento sin precedentes. La mística energía de Rapa Nui, nombre nativo de la Isla de Pascua (Chile) llegó hasta la localidad de Chepito, en el distrito de Mórrope, generando un encuentro que conmovió a estudiantes, docentes y a toda la comunidad educativa, despertando orgullo y reafirmando la fuerza de las raíces ancestrales.
En el marco del Proyecto Internacional de Intercambio Cultural “Guardianes de la Luna: Voces del Mar y del Desierto”, la Dirección Desconcentrada de Cultura de Lambayeque logró unir, en un solo espacio, tradiciones milenarias y perspectivas del mundo que pocas veces se encuentran.

Por un día, la I.E. N.º 10888 “Señor de los Milagros” se convirtió en un puente vivo que conectó la profundidad del océano polinesio con la sabiduría del desierto mochica.
Una explosión de arte, identidad y cosmovisión
El encuentro reunió a portadores de la
cultura Muchik, estudiantes, docentes y a la delegación chilena del Colegio Lorenzo Baeza Vega de Rapa Nui, cuya visita marcó un antes y un después en la vida sociocultural de Chepito.

Cantos polinesios, danzas ancestrales y expresiones artísticas rapanui estremecieron al público, abriendo un diálogo profundo entre mar, desierto y luna.
La comunidad Muchik respondió con la misma potencia espiritual y simbólica:La Leyenda de Naylamp, La danza de la chicha, El Ritual Muchik a la Luna y La danza de las algodoneras.

Cada presentación reafirmó un legado que se mantiene vivo y vibrante.
Un puente cultural que se fortalece
El compromiso de la Embajada de Chile en Perú —agradecido de manera especial por la DDC Lambayeque— hizo posible este histórico intercambio, que no solo celebró la diversidad, sino que fortaleció la identidad, el orgullo regional y la valoración del patrimonio vivo.

Este evento no fue simplemente una actividad escolar: fue un recordatorio poderoso de que la interculturalidad es camino, encuentro y futuro.