Durante la 61ª sesión de la Asamblea General de la ONU en 2006, los ministros de Relaciones Exteriores de los entonces llamados “BRIC” (Brasil, Rusia, la India y China), presentaron el mecanismo de cooperación entre sus respectivos países.
Al cabo de diez años, luego del ingreso de Sudáfrica al grupo, los BRICS se han convertido ya en un motor para la construcción de una nueva administración global y en defensores de los intereses de los mercados emergentes y países en vías de desarrollo. Se trata de una década dorada.
Los frutos en estos diez años
Después de diez años de desarrollo, los
BRICS han alcanzado muchos éxitos en cuatro sectores: administración global, cooperación pragmática, intercambio cultural y construcción de mecanismos.
En primer lugar, los países BRICS han promovido constantemente la eliminación del viejo sistema de administración política y económica mundial, y han abogado por el establecimiento de uno nuevo, así como impulsar un rumbo más justo, razonable y eficiente.
Los BRICS coordinan y expresan una posición conjunta en cuanto a los problemas candentes. Persisten en el multilateralismo y respaldan el intercambio y la coordinación en foros internacionales como el G20, la ONU, el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional y sus marcos respectivos.
Asimismo, promueven el establecimiento de una economía mundial abierta y el perfeccionamiento de la administración económica mundial.
Durante estos diez años de cooperación, los BRICS han estado relacionados con la evolución de los mercados emergentes y países en vías de desarrollo, y han mejorado la representación y la voz de estos en los asuntos internacionales.
Además, han defendido un nuevo proyecto de administración global y se han vuelto una importante fuerza de promoción de la democratización de las relaciones internacionales, la globalización de la economía mundial y la diversidad cultural humanista.
En segundo lugar, destaca la cooperación comercial pragmática, considerada como la base de la cooperación entre los BRICS.
En estos últimos diez años, la economía de los países BRICS ha pasado de representar el 12 % al 23 % de la economía mundial, mientras que su volumen comercial ha crecido del 11 % al 16 % del nivel mundial.
Más aún, el derecho a voto de los países BRICS ha llegado ya al 13,24 % y representan hoy una cuota del 14,91 % en el Fondo Monetario Internacional. Los países BRICS han contribuido en más del 50 % a la economía mundial en los diez años pasados.
La cooperación financiera es el logro de mayor realce en la primera década de cooperación entre los BRICS.
El grupo ha impulsado con éxito la reforma de los Acuerdos de Bretton Woods, del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional, así como el establecimiento del Nuevo Banco de Desarrollo, la primera institución multilateral de financiación establecida por países en vías de desarrollo, con el fin de apoyar la construcción de infraestructura y el desarrollo sostenible entre los países BRICS, otros mercados emergentes y los países en vías de desarrollo.
En tercer lugar, la opinión pública en cuanto a la cooperación entre los BRICS se ha ido consolidando a través de intercambios culturales y educativos.
Los países BRICS firmaron en 2015 un acuerdo intergubernamental de cooperación cultural y planes de acción relacionados con el apoyo a los intercambios culturales en arte, deportes, medios de comunicación, think tanks y medicina tradicional.
Además, los países BRICS han celebrado conjuntamente juegos deportivos, ferias de cine, festivales de medicina tradicional, etc., e incluso han llegado a producir una película, titulada ¿A dónde se ha ido el tiempo?
Los BRICS creen que el futuro le pertenece a la nueva generación de jóvenes y prestan mucha atención a los intercambios entre adolescentes y a la cooperación en educación, así como a la formación de talentos innovadores con visión internacional.
En cuarto lugar, la construcción de mecanismos entre los BRICS se ha ido desarrollando a un ritmo constante, lo que ha permitido formar una estructura de cooperación completa, de múltiples niveles y extensa.
Desarrollado desde la nada, el mecanismo de cooperación ha contribuido a la organización de reuniones de cancilleres hasta cumbres de líderes, así como al establecimiento de un marco de múltiples capas de cooperación pragmática en docenas de campos, con el fin de gestionar los asuntos administrativos estatales.
Los países BRICS han establecido numerosos mecanismos de cooperación, como el Nuevo Banco de Desarrollo de los BRICS.
La experiencia de los BRICS
Dos experiencias sobre todo han conducido al éxito de los BRICS en materia de cooperación: la cooperación propiamente y la paz, ambas con enfoque en el desarrollo.
Como consecuencia del ascenso de este grupo de países emergentes, la cooperación entre los BRICS ha podido construir una nueva relación entre países grandes y nuevas relaciones internacionales.
Los países BRICS atraviesan por una misma etapa de desarrollo, cumplen tareas similares y enfrentan los mismos desafíos. La exitosa experiencia de los BRICS sirve como ejemplo a los países en vías de desarrollo en cuanto al resurgimiento de las naciones y al desarrollo económico y social.
El espíritu de los BRICS
Durante la Cumbre de Líderes de los BRICS, celebrada en Fortaleza (Brasil) en 2014, el presidente de China, Xi Jinping, presentó como espíritu de los BRICS los conceptos de apertura, inclusión, cooperación y beneficio mutuo, que han alcanzado un consenso general entre los países miembros y han sido también bien recibidos por otros mercados emergentes y países en vías de desarrollo.
Esta relación estratégica de “asociación en lugar de alianza” sigue el principio de igualdad, se basa en un modelo de coordinación y comunicación, y busca la unanimidad mediante consultas, lo cual es un ejemplo de cooperación entre grandes países emergentes y países en vías de desarrollo.
Principios de la cooperación
Los BRICS siguen los principios de igualdad, negociación, pragmatismo y cooperación. El principio de igualdad es el fundamental dentro de la cooperación entre los BRICS. A pesar de las diferencias en economía, población y territorio, todos los Estados miembros actúan sobre la base de la igualdad y respetan y consideran plenamente el interés de todos los miembros.
Todo ello es una muy importante diferencia respecto a otros mecanismos de cooperación entre grandes potencias.
El consenso de los BRICS
Los BRICS han establecido una dirección de desarrollo de “cuatro construcciones” y se vienen esforzando por construir “mercados integrados, redes de circulación de múltiples niveles, conectividad por tierra, aire y mar, y mayores intercambios culturales”.
Los países BRICS han establecido también una asociación para “mantener la paz mundial, facilitar el desarrollo común, promover las civilizaciones múltiples y mejorar la gobernanza económica mundial”.
RCH/FPQ