La cañihua es un grano andino con alto valor nutricional, inclusive más que la propia quinua, pero se consume muy limitadamente, solo como harina porque aún falta mejorar la productividad de sus cultivos, informaron expertos del Instituto Nacional de Investigación Agraria (INIA).
El investigador de la entidad científica, Vidal Apaza, sostuvo que la oferta dispersa es uno de los problemas, pues los agricultores no se concentran en un lugar. Además, quienes procesan la cañihua usan técnicas artesanales para producir la harina y necesitan capital para modernizarlas.
“Son problemas que hay que atender para incrementar el mercado. Actualmente no hay muchos consumidores. En Puno, por ejemplo, no existen empresas que se dediquen al procesamiento de la cañihua y el campesino la produce de manera básica. Su cultivo está disminuyendo pues antes era 7,700 hectáreas y6 ahora 6,000”, comentó a la agencia Andina.
Señaló además que las plantas de la cañihua, existen unos 23 tipos de este grano en Puno, no tienen uniformidad de madurez, y por esa razón los agricultores tienen que realizar hasta tres cosechas para poder ofrecerlas en el mercado.
“El INIA se ha dedicado a apoyar a los agricultores para que mejoren su productividad y que logren uniformidad de madurez para su cosecha. Hay que potenciar ese trabajo, para especializar la cañihua de acuerdo al tipo de planta que tiene o para ser usada solo como semilla”, agregó.
Actualmente, la harina de cañihua o cañihuaco como se le conoce, se le consume en bebidas o panecillos, en yogurt, leche, tortas o mazamorras de leche, pero sus hojas también se usan para preparar ensaladas por la cantidad de proteínas que contienen.
Sobre su valor nutricional, la doctora Ritva Repo-Carrasco, investigadora de Industrias Alimentarias de la Universidad Nacional Agraria La Molina, refirió que consumir el cañihuaco regula el colesterol, los triglicéridos y combate la anemia por el alto contenido de hierro.
“Es una maravilla pues además tiene grasa, carbohidratos, un tipo de aminoácido que es la lisina, que no tiene el trigo ni la cebada, y que sirve para fortalecer el sistema inmunológico tanto en niños como en adultos”, manifestó.
Además, es rico en aceite de uso comestible y la mayor fuente de fibra dietética, por ende de energía que tiene un efecto importante en la salud de las personas, precisó Repo- Carrasco. La científica sumó a los beneficios del grano, el reducir riesgos cardiovasculares y prevenir el cáncer.
Usos de la cañihua ó cañihuaco
Para Flavio Solórzano, dueño del restaurante El Señorío de Sulco, la harina de cañihua o cañihuaco no se adapta a muchas preparaciones, sino que tiene formas específicas de consumo con frutas como la lúcuma y plátano, leche que puede combinarse con vainilla y clavo de olor (especies).
Puede mezclarse también con chancaca, miel, mermelada de sauco, almendras y se adapta bien a la azúcar rubia. Por lo que puede consumirse con jugos o mazamorras.
“El cañihuaco es extraordinario; puede consumirse como ingrediente para helados, o dulces como el brownie”, refirió.
La cañihua se cultiva sobre todo en Puno, Cusco y Arequipa sobre los 3,800 a 4,000 metros sobre el nivel del mar, aunque la mayor producción se logra en el altiplano puneño. Según estudios realizados por el INIA en el Perú existen 334 tipos de cañihua.
Recientemente el Concytec organizó la quinta mesa de diálogo sobre ciencia, biodiversidad y gastronomía que promueve entre investigadores y cocineros del país. Las anteriores reuniones versaron sobre el ají, frutos desconocidos, hongos comestibles y algas.
Esta mesas buscan que la ciencia esté al servicio de la cocina peruana, qué acerque descubrimientos útiles para potenciarla, que den a conocer las propiedades de los ya existentes o para atender sus necesidades de productos.
(FIN) SMS/ART
Publicado: 23/5/2016