El escritor Juan Morillo, integrante del mítico grupo ‘Narración’, presenta este miércoles 24, en la Feria Internacional del Libro de Lima, 'La rueda de la fortuna', su última novela, cuya acción se desarrolla en varias ciudades del Perú y también en París y Nueva York.
“Sobre muchos de los sucesos de la novela, flota el clima político del Perú de las últimas décadas del siglo pasado: violentos movimientos estudiantiles en Trujillo, el compromiso de muchos jóvenes de incendiar la pradera para cambiar la realidad del país, su participación decisiva en el proceso de la lucha y el surgimiento, en muchos, del germen de un mal nunca previsto: la decepción”, dice Morillo.
En la novela, publicada por Sinco Editores y presentada en Madrid en mayo de este año, hay, además, vivas imágenes de la matanza llevada a cabo en Ayacucho por el gobierno militar de Velasco Alvarado y empieza a insinuarse la violenta presencia de Sendero Luminoso, y también, por contraste, espacios vibrantes donde florece el amor o se marchita.
Para el personaje de 'La rueda de la fortuna', que sueña con escribir la gran novela de su vida, la obra se le prefigura no como una historia rica en sucesos, con un hilo lógico que lo va vertebrando todo, sino como un cúmulo de hechos, en apariencia desligados unos de otros, pero que, a la larga, se van fusionando a través de invisibles vasos comunicantes.
A un lector habituado a las estructuras lógicas y lineales, 'La rueda de la fortuna' puede sorprenderlo de arranque, cuando, tras una larga referencia a Vargas Llosa, se produce un brusco cambio de tema.
La imagen de la vida
“Desde que empecé a escribir novelas, siempre me pareció interesante crear, en su estructura, la imagen de la vida: un todo más o menos informe, lleno de vericuetos y sucesos insospechados, interesantes, pero sin aparente relación con los demás. Algo de todo esto se puede encontrar en mis otras novelas, en cuyo final suelen confluir, de algún modo, aunque sea como un eco, todo el resto de sucesos”, explica el autor.
Morillo (La Libertad, 1939) señala que en sus novelas siempre hay una ruptura del artificio de la linealidad en beneficio de una acumulación de sucesos que diversifican la historia, reproduciendo, así, de algún modo, la ampulosa e ilógica imagen de la vida.
En 1964, publicó en Trujillo el volumen de cuentos Arrieros, su primer libro. Luego vino un largo silencio editorial que fue roto en 1999 con otro libro de cuentos, Las trampas del diablo. Desde entonces, parece haber abandonado el relato corto, pues ya ha publicado 10 novelas en lo que va de este siglo.
“La novela es el género que me ofrece el espacio que mejor se acomoda no solo a mi concepción de las historias que he de contar, siempre amplias y de trama complicada, sino también a mi necesidad de expresar, in extenso, casi siempre a través de los personajes o cuando reflexiona el narrador, mis maneras de pensar sobre cualquier cosa de la vida”, explica.
En 1978, Morillo viajó a la República Popular China para trabajar como profesor de español en una universidad de Pekín. El contrato era de doce meses, pero se quedó allí cuarenta años.
Lima, ‘Narración, Pekín
“Me sigo identificando con el socialismo como concepción ideológica, pero no es esta la razón por la que viajé a China. Me hubiera gustado mucho saber cómo vivía la gente en un país socialista, pero llegué a China dos años después de la muerte de Mao y eso ya no era posible, porque la política de reforma y apertura con que China anunciaba una nueva etapa, dejaba sentir la presencia de un aire desconocido en el país: el capitalismo. Un mes después de llegar a Pekín, ya podía decir que no había señales de la vida socialista, tal como la había imaginado”.
En el Perú, Morillo había integrado el grupo ‘Narración’, y en Pekín se reencontró con dos miembros del grupo, sus amigos Oswaldo Reynoso y Miguel Gutiérrez, quienes también habían sido contratados como especialistas de español.
Morillo vivió en China entre 1978 y 2018 y en esas cuatro largas décadas fue testigo de excepción de los grandes cambios registrados en ese país y también de la sangrienta represión a los estudiantes que protestaban en la plaza Tiannamen.
En China, también encontró el tiempo para escribir del que no disponía en el Perú, y allí escribió la mayor parte de su obra. De ella, el reconocido crítico Ricardo González Vigil afirma: “Su caudalosa producción literaria constituye una de las más significativas de las letras peruanas contemporáneas”.
En Pekín, el poeta norteamericano Allen Ginsberg (al centro) junto a los escritores peruanos Mito Tumi, Juan Morillo, Georgina Cabrera y Julio Heredia (1985). Foto: Cortesía.
Sobre el autor
Escritor, profesor y periodista, Juan Morillo Ganoza nació en Taurija, La Libertad, en 1939. En 1978 viajó a Pekín para trabajar como profesor de español en la Universidad de Lenguas Extranjeras y vivió en la capital de la República Popular China hasta el año 2018. En la actualidad reside en Madrid, España.
Ha publicado los libros de cuentos Arrieros (1964) y Las trampas del diablo (1999), así como las novelas El río que te ha de llevar (2000), Matar el venado (2002), Fábula del animal que no tiene paradero (2003), Aroma de gloria (2005), Memoria de un naufragio (2009), Hienas en la niebla (2011), La casa vieja (2014), Ardiendo en la batalla (2017) y Cenizas en el cielo (2023).
La rueda de la fortuna será presentada este miércoles 24 de julio (8:00 de la noche) en el auditorio César Vallejo de la FIL Lima 2024. Los comentarios estarán a cargo de Sara Beatriz Guardia, Ricardo González Vigil y Marco Martos.
Más en Andina:
(FIN) NDP/CCH
Publicado: 23/7/2024