Gran cantidad de agua y lodo se deslizó de la parte alta del cerro colindante y convirtió las calles en riachuelos y lodazales, generando emergencias exactamente en el barrio San Lucas donde en un sector dejaron una obra inconclusa.
Las calles Tomás Bravo, Circunvalación y Cahuide fueron las más afectadas. Hasta aquí llegaron miembros de la compañía de Bomberos, Defensa Civil de Yauyos y personal de Serenazgo, con baldes, tinas, lampas y motobombas prestaron apoyo a las familias afectadas.
El anexo de Chocón en el distrito de Acolla también fue afectado por la torrencial lluvia y granizada. Allí las calles quedaron intransitables debido a la gran cantidad de agua que discurrió por esas vías.
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