El Instituto Nacional de Salud del Niño (INSN) Breña advirtió que la resistencia a los antimicrobianos constituye actualmente una pandemia silenciosa, ya que las infecciones por bacteria resistente están asociadas a una alta mortalidad, a mayor estancia hospitalaria y mayores costos de atención.
En el marco de la Semana Mundial de la Concientización sobre la Resistencia a los Antimicrobianos, del 18 al 24 de noviembre, Jorge Candela Herrera, coordinador de la Unidad Funcional del Programa de Optimización del Uso de Antimicrobianos (Ufproa), dijo que es muy importante crear conciencia sobre este problema para prevenir en primer lugar las infecciones por bacterias resistentes y, en segundo lugar, evitar la presión de generación de resistencia a los antibióticos que se tiene disponibles.
“Ya se habla de la era postantibiótica para algunos pacientes con infecciones por estas bacterias. No tenemos opciones de tratamiento antibiótico que sean eficaces y seguras para combatir estas infecciones”, precisó el especialista.
Explicó que el uso inapropiado de antimicrobianos puede darse tanto a nivel de la comunidad por automedicación de antibióticos o por no cumplir con las indicaciones prescritas por el médico en relación con los días de tratamiento.
“Muchas veces el niño mejora a las 24 o 48 horas y los padres le suspenden las medicinas, los antibióticos, y el menor no completa el curso del tratamiento que generalmente es de cinco a siete días. Esto atenta contra la eficacia de los mismos y genera resistencia. El otro problema es la automedicación, repetir la receta médica de prescripciones anteriores”, dijo.
Candela señaló que la mayoría de infecciones que ocurren en niños es causada por virus o se trata de infecciones autolimitadas que no requieren de tratamiento con antibiótico alguno. Por lo tanto es muy importante que las madres y los padres solo usen antibióticos cuando estos son prescritos por los médicos.
El especialista indicó que el mal uso de antibióticos conlleva a que “no podamos tratar de manera efectiva las infecciones que ameriten tratamiento con antibacterianos. Nos deja con pocas opciones para poder establecer el estado de salud del paciente”.
Recomendó al público evitar la automedicación de antibióticos y que cumpla con la prescripción médica previa evaluación. A nivel hospitalario pidió a sus colegas hacer uso racional de los antimicrobianos y a suspenderlos cuando se crea que no son necesarios.
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Publicado: 21/11/2024