El incremento de incendios forestales en la región Áncash genera una creciente preocupación. Según el Centro de Operaciones de Emergencia Regional (COER), en lo que va del año se han atendido 166 incendios en distintos puntos de la región. La situación se agravó en diciembre, cuando se registraron 28 emergencias, frente a apenas tres casos reportados en noviembre.
El balance general señala que la
provincia de Huaraz es la más golpeada, con 31 incendios forestales. Le siguen Huari y Mariscal Luzuriaga, con 22 y 15 casos, respectivamente.
Las consecuencias han sido severas. Una persona perdió la vida y otras dos resultaron heridas; además, cuatro personas quedaron damnificadas y cinco fueron afectadas. En cuanto a daños materiales, cuatro viviendas fueron destruidas y otras cinco resultaron afectadas. A ello se suma la pérdida de 4,280 hectáreas de cultivos y la afectación de otras 3,252 hectáreas. En el ámbito ambiental, el fuego arrasó con 1,951 hectáreas de cobertura natural.
El
incendio forestal más reciente se registró en el sector de Tayacoto, en el distrito de Independencia, provincia de Huaraz, donde varias hectáreas de cobertura natural fueron consumidas por las llamas. Para controlar el siniestro, trabajaron de manera coordinada el Grupo de Intervención Rápida ante Emergencias y Desastres (GIRED) y pobladores de la zona.
Desde la Oficina Regional de Gestión del Riesgo de Desastres se advirtió que la mayoría de incendios son provocados, muchas veces por creencias erróneas. “El fuego no forma nubes ni genera lluvias. Es un mito. Las quemas solo incrementan la contaminación y elevan el riesgo de incendios forestales”, precisó la entidad, que exhortó a la población a evitar las quemas agrícolas o de limpieza, debido al alto impacto ambiental y al riesgo que representan para la vida y los ecosistemas.