Un incendio forestal "incontrolable" se registra en estos momentos en el anexo El Cenizo, del centro poblado El Virrey, en la región Lambayeque, en el límite con Piura, informó el jefe de la Estación de Bomberos N.° 174 de Olmos, Erick Gamarra Arbañil.
Refirió que en estos momentos retorna a la zona, a 50 kilómetros de la capital del distrito de Olmos, un grupo de seis hombres de rojo con un vehículo cisterna y una unidad de rescate; sin embargo, no pudieron ingresar por lo agreste y la humareda.
“El incendio forestal está incontrolable”, afirmó en diálogo con la Agencia Andina y advirtió que el siniestro arrasa los pastizales del anexo El Cenizo, ubicado en el distrito de Olmos.
Sostuvo que al tratarse de un lugar de difícil acceso vehicular, se complica el control de la emergencia que, al parecer, habría sido originada por las cenizas que dejan los criadores de abejas y al contacto con los pastizales secos provocaron que el fuego se extienda de forma rápida.
Pastizales arrasados por el fuego
Dijo que según el alcalde del centro poblado El Virrey, José More Arroyo, más de 1,000 hectáreas de pastizales han sido arrasadas por el fuego, así como algunos animales.
Gamarra Arbañil indicó que el fuego está en dirección hacia sectores de Piura por lo que coordina con sus homólogos piuranos para que apoyen con sus unidades vehiculares y maquinaria pesada, porque están en riesgo las familias de esa localidad limítrofe.
Así, la Compañía de Bomberos de Morropón (Piura) acudirá al lugar, pues la estación de Chulucanas está sofocando otro incendio forestal de su jurisdicción.
La autoridad bomberil formuló un llamado a la población lambayecana para evitar quemar maleza, pasto o residuos agrícolas que puedan desencadenar un incendio forestal.
Más siniestros en otras zonas de Lambayeque
En las últimas semanas se han registrado incendios en otras localidades como Olmos, Motupe, Salas.
Los incendios forestales generan pérdidas y las consecuencias son muy negativas sobre los recursos naturales debido a que destruyen la vegetación, matan la fauna silvestre, eliminan la vida en el suelo, contaminan las aguas y, finalmente, dañan el aire.