En muchos países del mundo se conmemora hoy el Día de la Santa Cruz, instituida en el siglo IV de la era cristiana. Se trata de una tradición religiosa y popular que tiene orígenes muy antiguos en Jerusalén y desde la evangelización se sigue festejando en varios países de habla hispana donde se profesa la fe católica.
Según el portal de
National Geographic en español, esta festividad adquiere trascendencia en el siglo IV cuando el entonces general romano
Constantino tenía que enfrentar una batalla contra el bárbaro Majencio. La noche anterior a esta confrontación, Constantino tuvo un sueño en el que vio una cruz luminosa en los aires y escuchó una voz que le dijo: “Con este signo vencerás“. Al empezar el enfrentamiento bélico mandó a colocar la cruz en varias banderas de los batallones y exclamó: “Confío en Cristo en quien cree mi madre
Elena“.
La victoria fue total y Constantino llegó a ser emperador. En agradecimiento a lo que consideró una gracia divina, dio libertad a los cristianos. Elena, madre del emperador, pidió permiso a su hijo y fue a Jerusalén a buscar la “Santa Cruz” en la que Cristo murió. Después de muchas excavaciones, un 3 de mayo encontró tres cruces y no sabían cómo distinguir cuál era la de Jesús.
Ante Elena llevaron a una mujer agonizante, quien al tocar la primera cruz se agravó más su enfermedad. En la segunda cruz, la enferma se mantuvo sin mejoría, pero al tocar el tercer madero, recuperó completamente la salud. Elena junto con el obispo y los fieles llevaron esta cruz en procesión por las calles de Jerusalén. En el camino había una mujer viuda que llevaba a enterrar a su hijo. Por lo que acercaron la Cruz al fallecido y este resucitó.
Por varios siglos se ha celebrado en Jerusalén y muchos pueblos del mundo el 3 de mayo como la fiesta del hallazgo de la Santa Cruz.
En este día también se celebra a los albañiles. En algunos partes del mundo, en las construcciones los trabajadores tienen la costumbre de colocar en lo alto de las fachadas una cruz de madera adornada con diferentes elementos como flores y papel de colores. Después, esta cruz la mandan a bendecir con un sacerdote. En este día también se acostumbra que el jefe de la obra invite a los albañiles una buena comida.
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