El ovario poliquístico es la patología más frecuente en las mujeres en edad reproductiva (de 15 a 49 años) y el 70 % que la padece no ha sido diagnosticado, alerta el Seguro Social de Salud (EsSalud).
La doctora Andrea Cano Córdova, médica ginecóloga del Hospital Guillermo Almenara de EsSalud, explica que el síndrome del ovario poliquístico se manifiesta de diversas formas con alteración del ciclo menstrual, poca ovulación, complicaciones en el embarazo, entre otros.
Esta patología manifestó afecta entre el 8 y el 13 % de la población femenina y se asocia con problemas de mediano y largo plazo como la resistencia a la insulina, la diabetes, la hipertensión, el cáncer de endometrio e incluso trastornos psiquiátricos como la depresión y la ansiedad.
“Los antecedentes familiares en madres o hermanas que la padecieron, problemas genéticos y estados pro inflamatorios se asocian a esta patología. Lo más delicado es que la estadística apunta a que el 70 % de pacientes que la sufre aún no ha sido diagnosticada”, subraya la ginecóloga.
Cano señala que es importante reconocer oportunamente cuales son los síntomas que están ligados al síndrome del ovario poliquístico, como los periodos “oligoanovulación”, un trastorno en el que se ovula pocas veces, pocos años, o en el que no se ovula con regularidad.
Otro síntoma importante es el “hiperandrogenismo”, que se refiere al exceso de hormonas masculinas, pacientes con acné de difícil manejo o severidad, caída de cabello e hirsutismo, que es la aparición de vello facial o corporal de distribución y aspecto varonil.
Problemas en el embarazo y fertilidad
La especialista resalta que las pacientes que tienen antecedentes de ovario poliquístico pueden presentar complicaciones en el embarazo como abortos (hasta en un 25 %), diabetes gestacional y preeclampsia hasta tres veces más y una incidencia de parto prematuro hasta el doble de casos.
El síndrome del ovario poliquístico se asocia a una subfertilidad de hasta un 60 %, y pese a las dificultades para embarazarse, las pacientes con un buen manejo por el especialista, pueden salir gestando con normalidad al año siguiente.
De esta manera, señaló que para ver el tamaño del ovario y detectar presencia de quistes anormales, la prueba indicada es la ecografía. También so detectables en una laparoscopia pélvica, una tomografía computarizada o resonancia pélvica.
Recomendaciones
Se debe tener en cuenta que el síndrome del ovario poliquístico no se cura, solo se controla con diferentes medidas educacionales como la alimentación saludable y ejercicio de manera regular.
La especialista del Hospital Almenara recomienda a las mujeres que padecen ovario poliquístico y que deseen ser mamás, evaluarse oportunamente para someterse a un tratamiento para controlar alteraciones menstruales que padezca y hacer propicia la gestación sin riesgo para la madre o la criatura.