La directora de la Escuela Nacional Superior de Ballet, Gina Natteri, informó que lo normal era que su institución acogiera por lo general a más mujeres que varones. Sin embargo, esa situación fue variando desde hace una década.
“Venían jóvenes que querían aprender ballet para después poder bailar otros tipos de danza. Luego, pasaban la voz a amigos, y se iban quedando”, anota.
El resultado es que hoy se registran más hombres que damas como estudiantes de la escuela.
La coreógrafa explica al Diario Oficial El Peruano que su institución, que celebra en estos días sus 55 años de existencia, tiene dos objetivos. Por un lado, brindarle la experiencia del baile al público. “Todos pueden disfrutarlo”, asegura. La otra meta es formar profesionalmente a quienes desean dedicarse al ballet.
Menciona que para esta última se necesitan algunas condiciones como flexibilidad y resistencia, además de persistencia y compromiso. También dice que como tienen la costumbre de variar los espectáculos que montan los estudiantes, pueden adaptar las coreografías a las necesidades de su alumnado.
Una curiosidad que comenta Natteri es que muchos alumnos llegaron a la escuela buscando perfeccionar sus habilidades para bailes de ritmos populares actuales. En menor medida, también se inscribieron muchachos interesados en prepararse para danzas típicas. Pero después de experimentar con el ballet, se quedaron.
La directora indica que la mentalidad más abierta que existe en la actualidad ha ayudado para que ahora un mayor número de varones se interesen en asumir la danza como una opción profesional. Asimismo, se ha roto el estereotipo de que el ballet se practica solo en la infancia.
-55 años de fundado celebra la Escuela Nacional Superior de Ballet.
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(FIN) ECG/RES
Publicado: 16/11/2022