Andina

Elija usted: ¿cebiche, pollo a la brasa o chicharrón?

Qué plato bandera podría resumir las celebraciones de peruanidad

Foto: Difusión

16:45 | Lima, jul. 29.

Por Luis Miguel Santa Cruz

La devoción del peruano hacia su comida es incuestionable. Lo primero que se hace al recibir a un turista es darle una sonora bienvenida acompañada de un plato gigante sobre el mantel. Todas las celebraciones se dan alrededor de un manjar e incluso las penas se calman con el estómago lleno.

Pero aquí surgen más dudas e, incluso, pueden aparecer rivalidades. ¿Cuál es realmente la delicia peruana que merece un trato de símbolo? ¿Quién merece ser el protagonista de nuestras mesas en estos feriados por Fiestas Patrias?

Desentrañar esa fórmula es complicado y uno puede ignorar en las sumas y restas a algún plato que sea el favorito del compañero de al lado. Y es que la variedad, forjada por siglos de mixtura cultural y social, nos da una galería enorme de alternativas. Para que se hagan una idea, solamente hablando de sopas ya tendríamos más de 2000 opciones para probar y luego elegir. 

Tal vez por eso decidimos ir por lo seguro. En estas Fiestas Patrias, encontramos a Angie Oshiro y los cuarenta años de experiencia que tiene en el ceviche en un huarique del Centro de Lima. 

Desde su trinchera, defiende al plato marino con su historia y con lo imposible que resulta prepararlo fuera de nuestras fronteras. Recuerda la crisis del cólera de la década de los noventas y la prohibición tácita del ceviche, una época oscura de la que se salió con éxito y que no ha manchado el cariño actual que profesan las masas. 

Si esto fuera poco, Oshiro subraya que es imposible comer un buen ceviche afuera del Perú. Ya sea porque el pescado no es tan fresco por un tema geográfico, porque el sabor de los limones es diferente o porque otros insumos clave son imposibles de encontrar. 

Sin malicia, Angie desliza que todos los equivalentes extranjeros al ceviche son, en palabras amables, “difíciles de comer”. Pero antes que criticar gratuitamente, siempre invita a los turistas a que ellos mismas decidan si esto es cierto luego de probar nuestro tesoro marino. 

Las cartas están puestas, pero este no puede ser el fin del debate. El bus nos lleva a Miraflores, muy cerca de la zona turística que representan Larcomar y el Kennedy para conocer a otro gladiador gastronómico, querido por el coliseo. El pollo a la brasa se abre paso junto a Rodolfo León, quien argumenta una sólida defensa a su favor. 

El pollo a la brasa, subraya, está en todos lados y es que en todos los barrios hay fijo una pollería y una cabina de internet. León sabe que es un mercado dinámico y exigente porque ninguna pollería fracasa. Todos quieren un pollo a la brasa en el fin de semana, en una noche importante o como un antojo de aquellos que no resultan tan dolorosos para el bolsillo. 

Y León saca un as bajo la manga para cerrar su jugada al decir que el pollo a la brasa tiene el tamaño perfecto para dividirse entre cuatro personas y que todos terminen satisfechos. Cuatro personas que, estadísticamente, suele ser núcleo familiar del peruano. 

Parece momento de elegir un ganador, pero hay un participante que decide entrar a la carrera a última hora. Desde Chorrillos, Jacob Díaz introduce al ring al chicharrón como un peso ligero, pero con ganas de dar un nocaut. 

Aquí el conocedor afirma que el chicharrón es la comida que más cariño evoca, sustentando su victoria en lo emocional y obviamente en el sabor. Todos los desayunos fundamentales, “la comida más importante del día”, se celebran con chicharrón. 

Es tan importante que los políticos lo ponen siempre sobre su mesa en esos desayunos televisados en el mismo día de la votación y hasta hay aspirantes al poder que han fracasado por no darle una probadita. Los rivales rozan la lona con semejante derechazo.

Y al momento de dar a un triunfador, preferimos dejarle esa misión al lector. Que pruebe los platos mencionados y que se anime a buscar todos los que no han podido entrar en esta nota. Celebren comiendo, celebren eligiendo. 

Visión extranjera


Los platos favoritos de la gastronomía peruana, según los turistas extranjeros, son el lomo saltado (71%), el ceviche (70%) y la causa (67%). Esto fue revelado gracias al estudio “Análisis sobre el turismo gastronómico en el Perú”, realizado hace un par de años por Promperú. 

Sabrosa inversión 


El estudio de Promperú también sostiene que el gasto del viajero en gastronomía alcanza alrededor del 25% del total de su presupuesto, cifra que no suele ser menor a los 300 dólares. 

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(FIN) LSC/RRC

Publicado: 29/7/2019