Hoy 7 de abril se celebra el Día Mundial de la Salud para conmemorar la fundación de la Organización Mundial de la Salud (OMS), y este año el lema es ‘’Nuestro Planeta, Nuestra Salud’’ que busca crear conciencia en la población sobre el cuidado del ecosistema y la importancia de buenos hábitos alimenticios.
Sin embargo, hay muchas creencias y mitos populares que han sido aceptados por la mayoría como “relativas verdades” que, en su mayoría, no corresponden con la realidad. En este sentido, es necesario desmitificar todas aquellas aseveraciones que no son ciertas.
Es por ello, que la licenciada Lourdes Lazo, nutricionista de Modo USIL, aclara algunos mitos que existen en nutrición.
Mito 1: Si no consumo un jugo inmediatamente después de haberlo preparado, ya no es nutritivo.
Si bien es cierto que se pueden perder micronutrientes con el paso del tiempo, esto no sucede tan rápido. Si la preparación se conserva en refrigeración, en envase tapado, puede conservarse por unas horas más.
Mito 2: El consumo de leche aumenta el riesgo de cáncer.
La agencia Internacional de Investigación en Cáncer (IARC) ha desarrollado una clasificación para enlistar alimentos asociados al cáncer, divididos en cinco categorías; la leche no se encuentra en ninguna de ellas.
Mito 3: Todo lo natural es bueno y lo industrial es dañino.
Al respecto, se debe aclarar que no necesariamente un alimento ‘’natural’’ asegura el mantenimiento de la salud. Es importante centrarse en una alimentación lo más variada y completa posible, la cual puede incluir tanto alimentos naturales como industrializados, evaluando siempre la composición nutricional.
Mito 4: Para asegurar cubrir requerimientos diarios de vitaminas y minerales, es mejor consumir suplementos.
No es necesario a menos que se presente alguna patología y se encuentre bajo supervisión. Con una dieta balanceada que incluya todos los grupos de alimentos en las cantidades adecuadas, se asegura cubrir las necesidades nutricionales.
Mito 5: Las dietas sin gluten son mejores para perder grasa corporal.
No deberíamos dejarnos llevar por ‘’dietas de moda’’. Las dietas que son libres de gluten se prescriben especialmente en enfermedades como la celiaquía. Retirar los alimentos que contienen gluten en personas sanas, puede conllevar a deficiencias nutricionales.
Es importante tomar conciencia de que todos somos responsables de nuestra salud y la del entorno en el que vivimos; por ello, tomar medidas como adoptar hábitos saludables formará parte del cambio favorable que necesita nuestro planeta.