“Tengo ceguera en el ojo derecho y visión subnormal en el izquierdo”. Maruja Calderón sonríe apaciblemente. Pertenece al millón 588,540 personas con algún tipo de discapacidad a escala nacional. Hablamos de ese 5.3% de la población total que realiza un gran, enorme esfuerzo por conseguir un trabajo en el país.
“Es importante que las empresas conozcan las capacidades laborales de las personas con discapacidad que, aunque tenemos diferentes tipos de incapacidades, nos adecuamos a los diferentes puestos de trabajo que existen”, dice.
Tras mucho buscar una oportunidad laboral, Maruja llegó al Centro de Empleo del Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE), en Jesús María, donde finalmente consiguió un puesto de acuerdo con sus capacidades: asistente administrativo.
Sus ingresos la ayudaron a seguir estudios universitarios y hoy es abogada en la Subdirección de Registros Administrativos de la Dirección de Promoción del Empleo y Capacitación Laboral del ministerio.
Centro de Empleo
El MTPE cuenta con una Bolsa de Trabajo con inteligencia artificial (IA), que permite identificar postulantes con discapacidad de manera automática, considerando las habilidades/capacidades que el puesto de trabajo vacante requiere.
Solo en el 2022 se registraron 2,574 personas con discapacidad. A julio de este año ya se inscribieron 593 más.
Otra opción es el Acercamiento Empresarial, que busca brindar un servicio ágil y eficiente de dotación de personal a las empresas mediante la Bolsa de Trabajo y convocatorias masivas.
El año pasado, 187 empresas registraron ofertas laborales para personas con discapacidad; mientras que, hasta julio de este año, 238 empresas hicieron lo propio.
Nuevas habilidades
Hace 15 años, una bacteria le causó una lesión medular a Marleny Flores Torres. De pronto, todo se le hizo más difícil, mas no imposible.
“Estoy superfeliz con mi labor de vinculadora empresarial del Programa Nacional para la Empleabilidad en el MTPE. Puedo conectar a jóvenes que capacitamos con las ofertas laborales de las empresas”.
Para Marleny, su discapacidad no le ha limitado. “Al contrario, he aprendido a tener estas nuevas habilidades y desempeñarme en el tenis en silla de ruedas y representar a nuestro Perú, algo que es lo máximo”, cuenta.
En el mundo del deporte, brilla como integrante de la selección peruana de tenis en silla de ruedas.
Capacitación laboral
El MTPE ejecuta dos pilotos de capacitación laboral para este grupo poblacional en búsqueda de empleo. Uno es la beca Jóvenes Bicentenario, que busca fortalecer las competencias de los jóvenes para mejorar sus oportunidades de insertarse en el mercado laboral.
Hasta la fecha, ha beneficiado a 110 jóvenes con discapacidad en cursos de administración de redes CCNA, programación de Python y en soporte técnico de tecnología de información.
Asimismo, con la beca Empleabilidad Digital se pretende fortalecer las competencias en tecnología de la información y comunicación.
Sobre la campaña
El MTPE ha iniciado la campaña Rompamos Mitos, por más empresas accesibles e inclusivas (#SumémonosMás). El objetivo es promover el reconocimiento y valoración de las habilidades de las personas con discapacidad en el mercado laboral mediante actividades institucionales sostenidas en el tiempo.
Con ella, da a conocer y reconoce las buenas prácticas de inclusión de la gestión de la discapacidad en el ámbito laboral, que fortalecerá la gestión y promoción de entornos laborales, inclusivos y accesibles.
Superar los límites
Carlos Acuña tiene 23 años. Aunque no escucha, lee los labios y entiende lo que le dicen. Cuando empezó a buscar trabajo, encontró en la página de síndrome de Down que muchos jóvenes con esta discapacidad trabajaban en la cadena de hoteles Tierra Viva. Envió un mensaje a través de Facebook, solicitándoles una oportunidad. A los pocos días, le respondieron.
Desde mayo, trabaja como camarero y se encarga de la limpieza de las habitaciones. El joven dice que el éxito de su trabajo radica en la ayuda de sus compañeros, que lo motivan y alientan a desenvolverse con soltura entre pasillos y habitaciones. “Gracias a ellos aprendí mejor. Eso me ayudó a entrar en confianza y ahora puedo hacer mi tarea mucho mejor”, dice con orgullo.
Carlos vive en San Juan de Miraflores. Se levanta a las seis de la mañana, desayuna, usa el transporte público y llega puntual a las siete para iniciar su jornada laboral en el hotel Tierra Viva. “He recibido felicitaciones de los huéspedes por mi labor y eso me hace sentir muy contento y orgulloso de mi trabajo”, cuenta.
Cada vez más
En respuesta a la problemática derivada por la discriminación, la cual es abordada por la Política Nacional de Discapacidad para el Desarrollo al 2030, la legislación desarrolla medidas y acciones afirmativas, como la aplicación de la cuota de empleo de las personas con discapacidad, especificada en el artículo 49 de la Ley General de Personas con Discapacidad, que establece que las empresas incorporen a personas con discapacidad como parte de su personal, contribuyendo con ello a generar empleo con igualdad de oportunidades.
Los empleadores privados con más de 50 trabajadores deben contratar personas con discapacidad en una proporción no menor al 3% de la totalidad de su personal. El empleador privado al registrar al trabajador en la planilla electrónica debe señalar si se trata de una persona con discapacidad.
Independientemente del régimen laboral en que se encuentre el total de trabajadores, todas las entidades públicas están obligadas a contratar personas con discapacidad en una proporción no menor al 5% de la totalidad de su personal.
Nivel de cumplimiento
Conforme a los resultados reportados por la Superintendencia Nacional de Fiscalización Laboral (Sunafil), las empresas del sector privado –en el marco de la cuota laboral para las personas con discapacidad (3% del total de su personal)– incrementaron el número de trabajadores con discapacidad, pero sin llegar a cumplir la cuota.
En el 2020, de 6,010 empresas obligadas, 62 cumplieron la cuota de empleo y 1,553 incrementaron el número de trabajadores con discapacidad.
Al año siguiente, de 6,573 empresas obligadas, 88 alcanzaron la cuota y 1,488 aumentaron el número de trabajadores con discapacidad.
Y el año pasado, de 6,577 empresas obligadas, 146 cumplieron la cuota y 1,624 incrementaron el número de trabajadores con discapacidad.
Alternativa del teletrabajo
“Las personas con discapacidad tienen que ser competitivas para enfrentar al mercado laboral. Asimismo, las empresas deben cumplir con la ley y hay normas nacionales e internacionales que exigen este cumplimiento”, dice Mirella Pinto. Estudió dos carreras técnicas, pero no fue suficiente: siguió con derecho y ahora trabaja en el área de consultas legales del MTPE. Opina que aplicar la ley del teletrabajo para las personas con discapacidad es una buena alternativa para la oferta de puestos laborales, ya que no necesitarían salir de casa ni exponerse a los rigores del tráfico. “Si ellos las contratan, no van a perder esta población que tiene muchas ganas de seguir adelante y demostrar sus habilidades”, afirma.
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(FIN) DOP/RRC