Un total de 31 millones 910,645 soles destina el Consejo Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación Tecnológica (Concytec), a través de su unidad ejecutora Fondecyt, para financiar diversos proyectos e iniciativas que contribuyen al cuidado y desarrollo del sector ambiental.
En ese sentido, la entidad recordó que desde el 2017, en el marco del convenio con el Banco Mundial, trabaja en la ejecución e implementación de 43 proyectos a escala nacional que promueven: la producción de productos ecológicos; la
recuperación de las áreas forestales; la descontaminación de los ríos; el aprovechamiento de los residuos sólidos de la minería; el uso de materiales reciclados; entre otras iniciativas.
Asimismo, para incorporar asuntos ambientales y sociales en sus actividades, y en marco normatividad nacional vigente sobre Salvaguardas ambientales y sociales, que aseguran que las actividades financiadas por el Concytec y el Banco Mundial se realicen en marco del desarrollo sostenible, se viene desarrollando la implementación del Marco de Gestión ambiental y Social (MGAS), que vincula la participación de Universidades, Institutos de Investigación, Cites, empresas tecnológicas pyme y asociaciones de grupos interesados en las áreas de influencia directa e indirecta de los proyectos.
Estos esfuerzos se realizan con el fin de minimizar posibles impactos adversos al medio ambiente; así como identificar y promover buenas prácticas y procesos limpios orientados a la reducción de emisiones y desechos, uso sostenible de recursos naturales y energéticos, economía circular y reducción de la pobreza a través de emprendimientos, planes de negocios y revalorización del patrimonio natural y cultural de los pueblos.
Los proyectos ambientales
Entre los proyectos subvencionados relacionados a la protección del medio ambiente, está el de la Universidad Peruana Cayetano Heredia (UPCH), que consiste en cuantificar la capacidad de acumulación de carbono en los ecosistemas de humedales de la costa, sierra y selva del Perú, así como determinar su potencial valor económico relacionado a los créditos de carbono.
Cabe señalar que, los bonos o créditos de carbono son un mecanismo internacional de descontaminación para reducir las emisiones contaminantes al medio ambiente; es uno de los tres mecanismos propuestos en el Protocolo de Kioto para la reducción de emisiones causantes del calentamiento global y efecto invernadero.
Por su parte, la Universidad Nacional Intercultural de la Amazonía (UNIA), lleva a cabo una investigación que permitirá elaborar madera plástica a base de compuestos reciclados para ser utilizados en construcciones livianas, contribuyendo no solo con la conservación del medio ambiente, sino con la mejora de la calidad de vida de las personas y desarrollo económico en la región Ucayali.
La Universidad Nacional del Callao (UNAC) desarrolla una tecnología que busca utilizar el agua residual de las poblaciones aledañas a los yacimientos mineros, eliminando las descargas sobre los ríos y permitiendo reutilizar estas aguas ácidas de origen industrial. Es por ello que esta tecnología denominada Synergie, ganadora del concurso proyecto de investigación avanzado, propone que los tratamientos combinados de estas aguas residuales constituyan una alternativa viable y sostenible, ya que sin el uso de productos químicos se logrará minimizar los costos, reducir el potencial de contaminación y sus efectos consecuentes en la salud humana y el medio ambiente.
La Universidad Nacional José María Arguedas, en Apurímac investiga la mitigación de degradación de los pastos naturales altoandinos aplicando técnicas ecológicas como la clausura al pastoreo, el abonamiento y la revegetación con especies herbáceas deseables y arbustos nativos para la recuperación de la florística, la estabilidad del suelo y la integridad biótica.
De igual manera, y junto al CITE Agroindustrial de Moquegua, lleva a cabo una investigación que consiste en la elaboración de empaques biodegradables con celulosa extraída de los residuos de cáscara de tuna y corona de piña; proyecto que no sólo contribuirá al cuidado del medio ambiente, sino que permitirá a su vez mejorar las oportunidades de negocio y competitividad de los productores de tuna y piña de la región.
El Instituto Nacional de Investigación en Glaciares y Ecosistemas de Montaña elabora la evaluación y estimación de la distribución espacio temporal de permafrost, o capa de suelo, a nivel nacional como potencial de reserva hídrica; y realiza el estudio sobre el aporte social, económico y ambiental en la conservación y pérdida de la biodiversidad marina-lacustre por el retroceso glaciar. Y, la Pontificia Universidad Católica del Perú, desarrolla una tecnología que se pueda aplicar a los desechos forestales de Madre de Dios para obtener grafeno de calidad similar al grafeno comercial disponible actualmente en el mercado. Entre otros proyectos que destacan por su compromiso con el cuidado del ambiente.
Se destacó, además, que el Proyecto Concytec – Banco Mundial está comprometido a seguir promoviendo el desarrollo de la ciencia, la tecnología y la innovación en favor del respeto a la biodiversidad, del cuidado y conservación del medio ambiente, así como del desarrollo sostenible.