Una estructura piramidal que podría datar de los años 550-800 fue descubierta en el interior del templo de Kukulkán, en el sitio arqueológico de Chichen Itzá, en el estado mexicano de Yucatán (este), informaron este miércoles ingenieros y antropólogos mexicanos.
Esta es la segunda estructura piramidal en el interior de Kukulkán que ha sido identificada luego de que se descubriera una primera en la década de 1930, lo que indica que la majestuosa construcción maya se erigió en al menos tres etapas, es decir tres pirámides una sobre otra hasta llegar a la que se conoce también como "El Castillo".
"Es como las muñecas matrushkas, de la grande sacamos otra y otra", dijo en rueda de prensa René Chávez Seguro, jefe del proyecto e investigador del Instituto de Geofísica de la estatal Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
La pirámide recién descubierta, que sería la más antigua al corresponder al periodo mayas puros, tiene unos 10 metros de altura.
La segunda, descubierta en la década de 1930 y que corresponde al periodo transicional (años 800-1000), alcanza 20 metros para culminar en El Castillo, de casi 30 metros y que corresponde al periodo de decadencia (1050-1300).
Denisse Argote, del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), explicó que en la arqueología prehispánica es común que las estructuras más importantes de un asentamiento se hayan realizado en varias etapas.
"Ya sea por el deterioro de las estructuras, porque llega un nuevo grupo de poder, porque se establece un nuevo linaje, porque se da una ceremonia de renovación de los tiempos... Hay muchos motivos por los cuales se puede construir otra nueva estructura", dijo Argote.
Esta estructura fue descubierta con una técnica no invasiva única en el mundo denominada tomografía, desarrollada por expertos de la UNAM y el INAH y que consiste en iluminar el interior de la pirámide para verla por dentro sin dañarla.
La importancia de este hallazgo, añadió Argote, es que permitirá conocer con mayor precisión a la cultura maya pura, es decir "su población original sin la influencia de la gente del centro de México" y que imprimó su huella en la estructura de Kukulkán tal como se conoce ahora.
Con esta misma técnica, en 2015 el INAH y la UNAM descubrieron que la pirámide de Kukulkán está construida sobre un cenote, como se denomina a los ríos subterráneos que abundan en el sureste de México y que los mayas consideraban sagrados.
Los investigadores presumen que los mayas conocían de la existencia del cenote desde que iniciaron la construcción de la primera etapa del templo en honor a Kukulkán, la serpiente emplumada, su máxima deidad.
Los españoles denominaron a este templo "El Castillo" y en 2007 fue declarada, tras una votación a nivel mundial, una de las siete maravillas del mundo moderno.