Defensores ambientales de diversas comunidades indígenas que habitan la cuenca Amazónica venidos de Colombia, Brasil y Perú, así como de otros países, defendieron este jueves en Lima la urgencia de crear una gran alianza para tener más presencia y estrategias frente a las múltiples amenazas que sufren.
"El objetivo de estos días es tratar de darle forma a una articulación regional que pueda fortalecer la participación y la incidencia de los defensores y defensoras en espacios internacionales", indicó a EFE Diego Saavedra, responsable del programa Derechos de la ONG DAR (Derecho, Ambiente y Recursos Naturales), que organizó el encuentro.
En salas de reuniones de un hotel limeño, representantes de comunidades de varios países expusieron sus preocupaciones, que en muchos casos son comunes, puesto que la violencia que sufren tienen orígenes parecidos, así como compartieron las condiciones limitadas de los estados a los que pertenecen para atender la situación de la protección a los defensores.
Los líderes hablaron de los desafíos comunes y la necesidad de estar más articulados a nivel regional para tener más peso en la elaboración de protocolos, políticas o en eventos internacionales como la Conferencia de las Partes (COP), la cumbre anual que realiza la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el cambio climático.
"Nosotros, como pueblo indígena, día a día sufrimos muchas amenazas, muchas necesidades, muchas problemáticas que el Gobierno no sabe. No lo sabe, las autoridades no lo saben y no saben nuestras realidades que vivimos, como las amenazas por defender nuestro territorio", expresó a EFE la coordinadora regional de los Pueblos Indígenas de San Lorenzo, Cádiz Caballero.
Expuso que desde su comunidad shawi, en el departamento amazónico de Loreto, se sienten olvidados por el Estado, por la falta de servicios de educación y salud, pero también amenazados por las mafias que ejercen actividades ilegales.
"Venimos viendo que quieren adueñarse, invadir nuestro territorio. Nosotros no lo vamos a permitir porque somos un equipo y estamos haciendo fuerza", declaró al añadir que antes de iniciar cualquier actividad en el territorio de su pueblo se tendría que dar una consulta previa, una opinión que también comparten muchos otros representantes.
Al igual que están de acuerdo sobre la indiferencia que ejerce la Justicia de los países donde viven cuando denuncian estas incursiones, "con la plata baila el mono", declaró Caballero al denunciar la impunidad legal de empresas o mafias.
"El escenario al que ellos se enfrentan cotidianamente es de una amenaza permanente y no es de una sola vía, entonces tienen amenazas de carácter legal por la aprobación de proyectos sobre tus territorios y tienen diferentes actores vinculados a mafias", dijo Saavedra.
Añadió que en este encuentro se ha llegado a la conclusión de fortalecer el trabajo intersectorial, y que la labor de la protección de los defensores no recaiga solo en un ministerio.
"Necesitamos un trabajo articulado y allí algo que están pidiendo las organizaciones en Perú es que se apruebe, por ejemplo, un protocolo de actuación para que el Ministerio del Interior y la Policía Nacional puedan actuar de manera más diligente", indicó.
Explicó que las comunidades no necesitan un encuentro que se de una vez al año, si no una articulación permanente para presentar las experiencias de las comunidades y obtener mecanismos más efectivos y conseguir un empuje regional.