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Cillóniz: Abastecimiento de alimentos está asegurado porque agricultura pasa por momento favorable

El abastecimiento de alimentos está asegurado, según Cillóniz. Foto: ANDINA/HéctorVinces.

El abastecimiento de alimentos está asegurado, según Cillóniz. Foto: ANDINA/HéctorVinces.

10:14 | Lima, jun. 03 (ANDINA).

El abastecimiento de alimentos en el Perú está asegurado, porque la agricultura atraviesa por un momento favorable en términos generales, mientras que el alza del precio de ciertos productos como los cereales es coyuntural, y si bien afecta a los consumidores, también beneficia a los productores locales.

Así lo sostuvo hoy el presidente del directorio de la Empresa Municipal de Mercados S.A. (EMMSA) y experto en temas agrarios, Fernando Cillóniz, al destacar que el país entra en un equilibrio interesante con crecimiento.

“En el Perú no hay desabastecimiento, el agro pasa por un momento favorable en términos generales. Hay cultivos puntuales que no la están pasando bien, pero en términos generales la agricultura peruana transita por un momento favorable”, subrayó en el programa Mesa Central de TV Perú.

Enfatizó que el país apuesta por la producción y eso conlleva a la rebaja en los precios, lo cual se equilibra con un alza que también responde a la mayor capacidad de consumo de la población como consecuencia del crecimiento económico y la reducción de la pobreza.

“Estamos encantados de que después de tantos años de crisis de precios de alimentos, los productores se están beneficiando con precios más justos y con ello se revierte la pobreza en el campo.”

Lluvias favorecen agricultura

Comentó que la ocurrencia de lluvias –“de las que se informó periodísticamente como negativas porque causaban desbordes e inundaciones”– son en realidad muy favorables para la agricultura.

“Cuando hay lluvias, la producción agrícola mejora, ahora estamos entrando a la fase de cosecha de esa temporada de lluvias, que ha sido favorable”, agregó.   

Respecto al alza de precios de algunos productos de panllevar, Cillóniz explicó que en el Perú hay cultivos destinados al mercado local, como las hortalizas y las frutas, que no tienen mucha referencia con el mercado internacional.

Sin embargo –agregó–, los cereales, las oleaginosas, el algodón, el maíz y el café suelen tener una relación directa con los precios en el mercado internacional.

“Para mala suerte de algunos, y muy buena suerte de los productores, esos productos en el mercado internacional sí subieron mucho el año pasado, e inclusive en lo que va del año han seguido subiendo”, aseveró.

Cillóniz citó como ejemplo el caso del arroz, que si bien se produce en el Perú en la cantidad necesaria para su consumo interno, en la medida en que hay "vasos comunicantes" con el mercado internacional, es lógico que el productor de este cereal consulte antes de ofertar en el mercado interno.

Al referirse al alza del pollo, que ha sido muy destacada por los medios de comunicación, Cillóniz comentó que el precio de esta ave, como el de muchos otros alimentos, sube y baja.

“¿Por qué no se refirieron al pollo cuando bajó el mes pasado? El pollo sube y baja y así será toda la vida. Creo que en el fondo hay un interés de propalar sólo malas noticias, eso parece que tiene un sentido periodístico importante. Repito, no estamos en problemas de oferta alimentaria.”

También sostuvo que, aunque se piensa comúnmente que se puede cortar la cadena de comercialización, ninguno de los que la integran puede ser dejado de lado.

“Hay acopiadores, estibadores, transportistas, comisionistas, transbordadores, comerciantes mayoristas, distribuidores minoristas, ninguno de los cuales es prescindible. La gente cuestiona mucho la intermediación y si uno quita alguno de estos eslabones se rompe la cadena.”

“Lo que sí reconozco es que la cadena tiene que ser mucho más eficiente. De ahí el clamor de más y mejores carreteras, porque al no existir ellas se encarece el costo del transporte y por consiguiente sube el precio al público”, dijo.

El experto señaló que para optimizar la comercialización se trabaja en medidas como la mejora de los empaques. “Los sacos de 120 o 130 kilos son infames, no sólo por el daño que le ocasionan a los estibadores, sino por la merma en productos como la papa y la cebolla”, enfatizó.

(FIN) LZD/RRC

GRM


Publicado: 3/6/2008