13:05 | Lima, feb. 17 (ANDINA).
La incidencia de casos de ansiedad y la depresión registra un aumento en el Hospital Víctor Larco Herrera y responden a la falta de manejo que tienen las personas de los cuadros de estrés agudo que sufren, reveló hoy la directora de ese nosocomio, Cristina Eguiguren Li.
“Aunque la esquizofrenia sigue siendo la patología mental con mayor demanda de atención, los casos de ansiedad aumentaron en el último año”, comentó.
Explicó que la persona que padece ansiedad tiene problemas de adaptación y dificultad para enfrentar contratiempos.
“La persona que presenta este problema de salud mental se encuentra en un estado de inquietud permanente. Si no se controla ese estado de ánimo, puede convertirse en angustia y quizás derivar en una adicción”, agregó.
En diálogo con la Agencia Andina, Eguiguren Li sostuvo que la ansiedad se manifiesta a través de palpitaciones y adormecimientos en el cuerpo, pérdida del apetito, presencia de sudoraciones, mareos y taquicardias.
En cuanto a la esquizofrenia, refirió que a nivel mundial el 1% de la población tiene este problema de salud. Aclaró que aparece durante la adolescencia y no durante la niñez. “Difícilmente los cuadros sicóticos se presenta en los niños y niñas”, manifestó
La especialista en psiquiatría infantil especificó que los cuadros psicóticos se presentan por causas biológicas, entre los 14 y 16 años, durante el periodo de tránsito hacia la juventud.
“La esquizofrenia es un trastorno con base neurobiológica, hay una alteración a nivel de los neurotransmisores, de las sustancias que envía una neurona a otra para cumplir con su función”, precisó.
La funcionaria aclaró que algunos comportamientos, como encerrarse en el cuarto y actuar “con el berrinche encima”, son naturales durante la adolescencia. Sin embargo, dijo, si esa conducta continúa en la juventud y la persona descuida su aspecto personal existe un problema que los padres deben atender.
Si además se asocian a visiones espirituales negativas, que enfatizan la presencia de “demonios”, el adolescente ya necesita a un especialista.
“El problema se agudiza debido a la poca comunicación y acercamiento que propician los progenitores a sus hijos y al poco tiempo que le dedican al diálogo y el compartir familiar”, subrayó.
(FIN) SMS/LZD
Publicado: 17/2/2013