Las casas reales y los principales dirigentes del mundo se unieron este viernes en un homenaje unánime al príncipe Felipe, duque de Edimburgo y esposo durante siete décadas de la reina Isabel II, fallecido a los 99 años.
Una de las primeras monarquías en reaccionar fue la belga. "La muerte de su Alteza Real el príncipe Felipe, Duque de Edimburgo, nos entristece profundamente", comunicaron el rey Felipe y su esposa Matilde.
El rey Harald V de Noruega, de 84 años, también transmitió su pésame a la Familia Real Británica, y mandó poner a media asta la bandera noruega en el Palacio Real, en Oslo.
El rey Carlos XVI Gustavo de Suecia recordó que Felipe de Edimburgo fue "durante muchos años un gran amigo de nuestra familia, una relación que apreciamos profundamente".
Conocido por su particular humor, y por su inquebrantable lealtad a la monarquía, Felipe vio desfilar durante décadas a generaciones de "royals" dentro y fuera de Europa.
"Su vivaz personalidad siempre dejó una impresión inolvidable", recordó el rey de los Países Bajos, Guillermo Alejandro, y su esposa, la reina Máxima.
'Querida tía Lilibet'
Los reyes de España, Felipe y Letizia, dirigieron un mensaje particularmente cariñoso a Isabel II.
"Querida tía Lilibet, hemos sentido una profunda tristeza al recibir la noticia del fallecimiento de nuestro querido tío Felipe", escribieron en el telegrama.
"Nunca olvidaremos las ocasiones que pudimos compartir con él ni el legado de servicio y dedicación a la Corona y al Reino Unido que siempre desempeñó a vuestro lado", continuó el mensaje.
"Vivió una vida ejemplar caracterizada por la valentía, el sentido del deber y el compromiso con la juventud y el medio ambiente", escribió el presidente francés, Emmanuel Macron, en un tuit en inglés.
La canciller alemana, Angela Merkel, expresó su "gran tristeza" por la muerte del príncipe. "Su amistad por Alemania, su franqueza y sentido del deber son inolvidables", señaló en Twitter su portavoz, Ulrike Demmer.
La reina Margarita II de Dinamarca, que perdió a su marido hace tres años, mandó un mensaje personal a Isabel II, y recordó que antes de pasar a ser príncipe consorte, Felipe ostentó el título de príncipe de Dinamarca.
También expresó su pésame el príncipe Alberto de Mónaco. "El príncipe se dedicó con alegría al pueblo del Reino Unido", dijo el presidente estadounidense, Joe Biden. Felipe de Edimburgo "encarnaba el alma noble y el espíritu orgulloso del Reino Unido", reaccionó el expresidente Donald Trump.
“Un marido fiel junto a una poderosa mujer”
El príncipe "demostró al mundo lo que era ser un marido fiel junto a una poderosa mujer", indicó el también expresidente Barack Obama. "Era un hombre de convicciones y principios", expresó el primer ministro canadiense, Justin Trudeau.
Otro mandatario de la Commonwealth (Mancomunidad) británica, el primer ministro australiano, Scott Morrison, saludó un hombre que "encarnaba una generación que no volveremos a ver".
Pakistán, el segundo país más grande de la Mancomunidad, describió a Felipe como "un sabio anciano, imbuido con un espíritu de servicio público único", en palabras del primer ministro, Imran Khan. El presidente ruso, Vladimir Putin, le deseó a la reina Isabel II "valentía y fortaleza mental ante esta dolorosa e irreparable pérdida".
La presidenta griega, Katerina Sakellaropoulou, recordó mediante un tuit que Felipe nació en Corfú. El mensaje, ilustrado con una foto de Felipe niño, ataviado con un traje típico griego, recordó que el duque "sirvió a su país durante décadas".
El duque de Edimburgo fue el consorte real más longevo de la historia de la corona británica y una presencia constante a la sombra de la reina Isabel II.
De ascendencia alemana, nació príncipe de Grecia y Dinamarca, el 10 de junio de 1921. "Durante más de setenta años ofreció sus servicios a la Corona (...) con dedicación ejemplar", recordó el presidente italiano, Sergio Mattarella.
Adorado como un dios
El ministro de Relaciones Exteriores checo, Tomas Petricek, optó por recordar la gran proyección de la monarquía británica en todo el mundo, herencia de su pasado imperial.
"Incluso una tribu del archipiélago de Vanuatu lo adora como un dios. Uno de los símbolos de la monarquía británica moderna se ha ido. Descanse en paz", explicó. "El príncipe Felipe será muy añorado en Israel y en el mundo", aseguró el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
Desde América Latina, uno de los primeros en reaccionar fue el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador. "Un pésame a los familiares, amigos y al Reino Unido por la muerte del príncipe Felipe", indicó.
Y desde Cuba, el canciller Bruno Rodríguez comunicó también sus "muy sentidas condolencias a Su Majestad Isabel II, Su Alteza el príncipe Carlos, a la familia real y al pueblo y gobierno británicos".