Durante la adolescencia, cuando aún está en desarrollo el control de los impulsos, los padres deben ser los frenos de sus hijos y no deben tener miedo de decirles no cuando pongan en riesgo sus vidas, por ejemplo, saliendo a una reunión o fiesta en pleno toque de queda por la pandemia del coronavirus covid-19.
Así lo señaló la psicóloga Carmen Masías Claux, directora ejecutiva de Cedro, al explicar que los padres de adolescentes y jóvenes deben hablar mucho con estos y negociar, advirtiéndoles las consecuencias que pueden tener sus actos.
"Si soy mamá de un hijo de 19 años no puedo de pronto impedirle que salga, pero sí que respete la norma como yo la respeto, y que tiene que llegar a cierta hora. Lo peor es cuando los padres se ponen en una situación tajante, de blanco o negro. La idea es negociar y hablar, pero dando el ejemplo", comentó en el programa Saludable Mente de Andina Canal Online.
La psicóloga dijo que la adolescencia dura más de lo que uno piensa, hasta los 22 años en promedio, pero que entre los 17 y 19 años las emociones son más intensas y muchas veces los padres ceden pensando que "mi hijo no me va a querer" o "me va a etiquetar de anticuado".
"Hay que tener un balance de negociación. Si el chico le dice 'mamá estoy desesperado porque quiero ver a mi enamorada' es un buen signo porque no está mintiendo. El problema es cuando ellos (los chicos) mienten porque saben que los padres se molestarán y les gritarán. Por ello es necesario aprender a negociar", subrayó.
De acuerdo con la experta, el lóbulo frontal -donde se encuentra el control de los impulsos- termina de desarrollarse cuando acaba la adolescencia. Sin embargo, anotó, no solo es un tema biológico, sino que entran en juego los aspectos sociales. "Por eso, a cierta edad, los padres actúan como frenos, tienen que poner la estructura y no tener miedo de decirles no a los hijos", recalcó.
Aprender a acatar las normas
La titular de Cedro asevera que el aspecto social, referido al respeto de las normas, no es algo que se aprende de la noche a la mañana, sino que se cultiva muchos años, durante la niñez. "Los niños, dependiendo de su edad, deben saber que sus actos tienen consecuencias. Y ante momentos críticos, dependiendo de su edad, deben aprender a responder".
Y aquí, añade, desempeñan un rol fundamental los padres, los abuelos, los tíos, el cuidador, la escuela y todo el entorno de los menores. "¿En qué medida estamos educando en el Perú para que los chicos y chicas sepan que deben acatar y cumplir las normas?", se preguntó.
Comentó que
están más preparados para resistir las prohibiciones y normas de la pandemia quienes aprendieron desde muy pequeños que si bien pueden divertirse, también deben acatar las normas, así como lo hacen sus padres. "¿Los que fueron a (
la discoteca de) Los Olivos estaban preparados? No".
Consideró que lo ocurrido en Los Olivos el fin de semana pasado "parece un acto extremo", pues no se respetó el distanciamiento social, el uso de la mascarilla, el toque de queda, la prohibición de reuniones sociales y además el consumo de alcohol hasta perder la noción de la realidad.
"No es como alguien que sale con su skate y llega a la casa antes del toque de queda o al límite, pero cumple. En el caso de quienes asistieron a la fiesta en Los Olivos sobrepasaron los límites de cualquier negociación".
Masías prefirió no juzgar a los padres de los asistentes a dicha discoteca, pero dijo que sí es necesario formularse muchas preguntas, como ¿qué pasó en esa niñez, en la pubertad y la adolescencia?, ¿cómo se manejó la negociación ante el pedido de los hijos?, ¿qué ejemplo han dado los padres?
"En la cuarentena los padres o una pareja adulta puede tomarse una cerveza si desea, pero no emborracharse ni hacer que el trago sea algo imprescindible. Cómo le puedo decir a mi hijo que no tome si yo no puedo dejar de beber. Esto tiene que ver con modelos, con el ejemplo, educando incluso sin palabras".
Respecto a las madres jóvenes que fallecieron en la tragedia y que dejan en la orfandad a hijos pequeños, hizo una reflexión: "A veces hay familias donde la madre soltera es desvalorizada en su toma de decisiones con respecto a sus hijos. Entonces son los abuelos quienes determinan muchas cosas de los nietos. Podrían ser también madres jóvenes sometidas a abusos en su hogar. Yo me pregunto si esa madre tiene este tipo de salidas como un escape. Entonces, ¿cómo juega la relación en esas familias?".
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(FIN) RRC