Los retrasos en los pagos continúan siendo una de las principales preocupaciones para las empresas de la región especialmente para las pequeñas y medianas empresas (pymes).
En este contexto, la automatización de cobranzas aparece como una alternativa clave. Se trata de digitalizar y centralizar todo el proceso de facturación, recordatorios y pagos, de manera que tareas que antes dependían de gestiones manuales se ejecutan de forma automática y trazable.
“A mayor volumen de operaciones, más difícil se vuelve mantener una visión clara del estado de las cobranzas, especialmente si las áreas de ventas, operaciones y finanzas no comparten información en tiempo real”, advierte Ricardo Pacheco, gerente general de Tupay.
Ante ello, explica que existen tres retos centrales que las organizaciones enfrentan hoy y cómo podrían enfocarse en la solución:
1) Emisión oportuna de facturas
Si la facturación no se realiza en el momento adecuado, el ciclo de cobro se retrasa y compromete la liquidez. La solución vendría por automatizar la generación y envío de facturas apenas se complete una orden.
2) Términos de pago claros y trazables
Errores o ambigüedades en los contratos generan demoras. Aquí lo oportuno es integrar la información en sistemas digitales que garanticen transparencia desde el inicio de la relación comercial.
3) Políticas consistentes de cobranza
La gestión manual suele ser informal y dispersa. Para ello es importante establecer protocolos claros apoyados en herramientas que permitan segmentar clientes y definir reglas de seguimiento.
Más allá de mejorar la tasa de cobro, Ricardo Pacheco señala que los beneficios de la automatización se extienden a la gestión financiera integral de las empresas.
“El flujo de caja se vuelve más predecible, lo que permite planificar inversiones o cumplir a tiempo con proveedores. También se mejora la experiencia del cliente, que recibe recordatorios oportunos y puede pagar sin fricciones. Además, se reducen los costos operativos, porque el equipo ya no dedica horas a tareas manuales repetitivas”, explicó.
Otro aspecto clave es la gestión centralizada.
“Cuando toda la información de órdenes y pagos vive en un solo lugar, las empresas tienen mayor trazabilidad, control y capacidad de análisis. Eso les da herramientas para crecer con solidez”, puntualiza.
Más en Andina:
(FIN) NDP / MDV
Publicado: 25/8/2025