El ingreso de mujeres al mundo de la ciencia no deja de crecer como puede observarse en últimas ediciones de la emblemática Feria Escolar Nacional de Ciencia y Tecnología "Eureka", la más importante del país, donde ellas superan en número a sus pares varones, logrando adjudicarse muchas veces los primeros lugares.
Así lo detalló Marco Rinaldi, coordinador del Programa de Popularización de la Ciencia del Concytec, durante el programa Martes Educativos de la Agencia Andina.
Rinaldi detalló que la participación de las mujeres alcanza el 55% en la competencia nacional que todos los años se desarrolla en el marco de la
feria Eureka.
“En el transcurso del año hicimos una estadística sobre la participación de los estudiantes en la etapa nacional de Eureka. Hemos tomado en cuenta los últimos 15 años y podemos decir con mucha satisfacción que Eureka tiene una mayor participación de mujeres en comparación de los hombres”.
El experto manifestó que esto evidencia el fomento de una cultura inclusiva, donde se promueve la participación de hombres y mujeres por igual.
“Es un dato alentador que no significa que la mayor parte del trabajo está hecho, porque la idea es llegar a más colegios, a más estudiantes y continuar fomentando la vocación científica abierta a todos los interesados”.
Guardianas de la quina
Una muestra de las ganas de superación y trabajo serio liderado por mujeres en el campo de las ciencias es el caso de las ganadoras nacionales de la categoría Ciencias Ambientales, quienes pertenecen a la región Amazonas. Las otras categorías en competencia son tecnología e Ingeniería, ciencias sociales y ciencias básicas.
Se trata de
Martitt Barboza Hernandez (15 años) y Stefania Vásquez Meza (13 años), quienes con la asesoría de su maestra Luz Maribel Quispe Sánchez, se presentaron a la última feria Eureka, con el proyecto “Comparación de sustratos en la propagación sexual y asexual del
árbol de la quina”.
Aunque de grados distintos del colegio público José de San Martín, localidad rural del El Progreso (Amazonas), se trazaron buscar la mejor manera de sembrar el emblemático árbol representado en nuestro escudo nacional.
“Comparamos ocho tratamientos para sembrar el árbol de la quina por medio sexual (semillas) y asexual (estacas). También utilizamos el cultivo en vitro. Nuestro proyecto busca propagar y conservar esta especie que está en extinción. Nos dijimos de qué sirve que esté en el escudo si se está perdiendo”, explicó Marlitt, de cuarto año de secundaria.
Con la idea en mente buscó a Stefanía de segundo de secundaria, pese a que era muy tímida, “porque conocía sus habilidades. Ella se expresa muy bonito y es hábil en la exposición”.
“Pensé que era una oportunidad para que se vaya desenvolviendo mejor. Además, ella tendría un poco más de tiempo (en la escuela) para desarrollar nuevos proyectos”.
Luchar contra el miedo
Para Stefanía, los mayores retos a los que se enfrentaron fueron competir con los otros proyectos de su región y por si fuera poco, su propio miedo. “Fue en enorme reto enfrentarme al público. Tenía mucho miedo, pero decidí afrontarlo porque es una gran oportunidad para salir adelante, dejar en alto mi nombre y representar a mi colegio”.
Al cabo de largos meses en hipótesis, investigaciones y mucho trabajo en campo lograron coronarse campeonas de Amazonas y llegar a la final en Lima, donde se llevaron el primer lugar en la categoría de Ciencias Naturales.
“Ya le perdí el miedo a expresarme. Me gustó mucho esta experiencia, así que vamos a ir a representar a nuestro país, a darle con todo para ver si podemos ganar”, comentó la pequeña Stefanía, quien agradeció el apoyo recibido de sus padres, de su colegio, de la UGEL y sobre todo de su asesora de investigación: Luz Maribel Quispe Sánchez.
“Se hizo pruebas en campo. Tuvimos que recolectar las semillas y caminar mucho. Somos de un colegio de una zona rural, tenemos un laboratorio no tan sofisticado, pero podemos decirles a todos que no necesitamos uno de última tecnología para hacer investigación”, comentó la joven docente.
Dijo que ella motiva siempre a sus alumnos a desarrollar investigación en la escuela “porque podemos solucionar múltiples problemas”.
“Lo que se necesitan son ganas, motivación, porque se trata de una satisfacción personal y de nuestra región. Queremos mejorar el proyecto, propagar el cultivo del árbol de la quina en vitro. Estamos trabajando con una ONG hace tres meses. Ya tenemos 1, 500 plantones”.
Comentó que la quinina, sustancia que se extrae del árbol de la quina, tiene propiedades beneficiosas para el cáncer de próstata, de colón y otras enfermedades.
“Debo decir que
Amazonas, por ocho años, va ganando el primer premio en la categoría de ciencias ambientales. Planeamos seguir el proyecto con apoyo del gobierno regional y otras entidades para entablar un vivero y ofrecerlo a todo el país”, comentó entusiasta.
Marlitt -quien quiere ser abogada especializada en derecho ambiental, y Stefany, quien sueña con estudiar
ingeniería de software para, en el futuro, poner unos sensores a los árboles y monitorear su uso y prevenir la tala ilegal- alentó a todos los niños y jóvenes a pensar en ciencia y disfrutar las satisfacciones que puede dar la investigación.
Clubes de ciencia
Marco Rinaldi manifestó que en la idea de seguir avanzando con el fomento de la ciencia, buscarán que se implementen progresivamente clubes de ciencias en el país.
“Estamos trabajando para que muy pronto cada colegio público y privado tenga su club de ciencia, como un espacio permanente de difusión de cuestiones científicas, habilidades y competencias en ciencia y tecnología”
Detalló además que este año el
Concytec, en alianza con el Ministerio de Educación, capacitó a más de 1,000 docentes del todo el país en metodologías de investigación.
“Fue un taller de dos días y hemos podido comprobar con Eureka que los colegios que hemos sumado este año han tenido una participación destacada debido a los docentes capacitados”.
Anunció que para el 2019 esperan llegar al doble de maestros.
500, 000 alumnos
La feria Eureka tiene 28 años de existencia. Es un concurso educativo abierto desde todas las escalas educativas, es decir que se puede participar desde inicial, primaria y secundaria. Este año participaron más de 500, 000 alumnos de todas las regiones del país.
Este último proyecto además ha sido reconocido como ganador absoluto de la feria Eureka y representará al Perú en la feria Milset, en Emiratos Árabes Unidos, donde participan delegaciones de África, Europa, Asia, América del Norte y América Latina (2019).
En Ciencias Sociales, el proyecto ganador (Cusco) fue Tambomachay: arte rupestre del hombre arcaico de Canchis.
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(FIN) KGR/RRC
Publicado: 14/11/2018