Residentes de la provincia de Chumbivilcas en la ciudad de Cusco protagonizaron una ronda de peleas durante el tradicional Takanakuy, que, con ocasión de las celebraciones por Navidad, se desarrolló en la urbanización Agua Buena del distrito de San Sebastián, en Cusco.
El docente René Aguirre Gutiérrez, parte del jurado, explicó a la Agencia Andina, que esta actividad se desarrolla desde tiempos remotos en la ciudad de Santo Tomás, capital de Chumbivilcas, sin embargo, por la migración se dan en ciudades grandes como Cusco.
Las peleas de ayer -que en reiteradas ocasiones destacan es en honor al Niño Jesús-, comenzó con una invitación a ritmo de huaylías, canto y danza típica de Chumbivilcas y Antabamba Apurimac, por la ciudad que posteriormente se dirigieron a Agua Buena.
Ellos llevan gorras o chullos multicolores, aves o cabezas de animales disecados, sus mujeres polleras y sombreros parecidas a campanas. La coreografía, el brinco y contorneo de las caderas es al ritmo de las huaylías.
En un complejo deportivo de Agua Buena, se colocó un estrado y concurrieron más de tres mil chumbivilcanos, cusqueños de diferentes provincias y turistas, nacionales y extranjeros, e incluso prensa internacional (de Colombia, Japón y Brasil).
Los contrincantes bajo reglas que ellos mismos impones, como el no llevar anillos en las manos o zapatos con punta de acero (típico que acompaña a sus polainas). El que cae al piso es declarado perdedor, y la contienda termina con un abrazo fraterno.
“Pueden ser personas que en el año mantuvieron una riña y por Navidad la resuelven, o que simplemente gustaron por pelear y se dan los golpes; pero todo acaba como hermanos con un fuerte abrazo”, afirma Aguirre Gutiérrez.
Esta actividad cuenta también con mayordomos que llevan la organización, en este caso fue Anderson Baca, torero conocido en provincias altas, quien ofreció comida y bebidas alcohólicas a los que protagonizaron las peleas.
(FIN) PHS/MAO
Publicado: 26/12/2016